Gallardón contradice a
Aguirre y asegura que no conocía el 'Tamayazo'
El
alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha asegurado hoy que no
conocía el Tamayazo antes de que se produjera, como se afirma
en el libro Esperanza Aguirre, la presidenta de Virginia
Drake, y ha asegurado que no quiere entrar en "una polémica que
puede perjudicar al PP".
Gallardón, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno
del Ayuntamiento de Madrid, ha afirmado que sus palabras en torno a
que no comentaría nada sobre la biografía de la presidenta regional
hasta después de los comicios de mayo del próximo año "no son una
frase hecha".
"A
seis meses de las lecciones hay cosas que no se deben de hacer, y no
seré yo quién las haga y quién entre en una polémica que puede
perjudicar a mi partido", ha añadido el regidor.
Al
ser preguntado si había hablado con Mariano Rajoy o con Esperanza
Aguirre sobre este asunto del libro, Gallardón ha señalado que con
el presidente del PP, Mariano Rajoy, habla "prácticamente todos los
días" y que con Aguirre no ha tenido "ocasión de hablar".
Manuel Cobo, vicealcalde de
Madrid- "Aguirre puede estar contenta con la publicación del
libro y eso me preocupa."
La venganza escrita
En
la biografía de Aguirre se dice que Gallardón perdía la Comunidad,
por lo que Aznar decidió presentarle como candidato a alcalde
Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad, no
olvida. Y, además, no perdona. A pesar de que ha
asegurado una y otra vez que ella y Alberto
Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid, se quieren "como
hermanos", porque hace más de 20 años que entraron
juntos a trabajar en el Ayuntamiento, lo cierto es
que su relación no es fraternal. En el libro La
presidenta, la biografía autorizada de Esperanza
Aguirre, escrita por Virginia Drake y editada por La
Esfera de los Libros, se recogen los desencuentros
de los dos líderes madrileños del Partido Popular.
El borrador del texto fue revisado antes de su
publicación por el gabinete de la presidenta.
No
obstante, ayer Aguirre intentó restar importancia a
la lista de agravios que ella misma había descrito
en el libro y evitó hablar del asunto. Por su parte,
Gallardón, al final de una visita a instalaciones
deportivas madrileñas, echó mano de la ironía para
abordar las tensas relaciones con la presidenta.
"Tengo el libro encima de la mesa, pero lo tengo
cerrado. No lo voy a abrir hasta el día 28. Hasta
esa fecha lo que tenemos que hacer todos es ponernos
a trabajar para ganar las elecciones".
En el
libro se deja entrever que Alberto Ruiz-Gallardón no
fue elegido en 2003 por José María Aznar, presidente
del partido, para encabezar las listas a la alcaldía
por los buenos resultados que iba a obtener (tal y
como Ruiz-Gallardón afirmaba), sino porque había
posibilidades de que perdiese la Comunidad.
"Los
resultados de las encuestas Wert se guardan bajo
siete llaves para evitar filtraciones (...). La
sorpresa fue mayúscula incluso para los propios
candidatos cuando se hace pública la decisión de
José María Aznar de enviar a Gallardón al
Ayuntamiento y a Aguirre a la Comunidad".
En la
biografía autorizada por la presidenta se asegura:
"Si Alberto se hubiese presentado candidato a la
Comunidad, su carrera política hubiera corrido un
serio riesgo (...). Las encuentas señalaban un
margen mayor de victoria para Alberto en el
Ayuntamiento que en la Comunidad. (...) Tras
conocerse los resultados, hay quien entiende que
Aznar no podía permitirse el lujo de que su supuesto
mejor alfil cayera a manos de un candidato
socialista apenas conocido por el 34% de los
madrileños".
Resultados
De los
resultados de las encuentas, dice el libro, "se
deduce, claramente y sin lugar a dudas, que es
Esperanza Aguirre la posible candidata del PP que
mejores resultados obtiene frente a Trinidad
Jiménez, mejores incluso que políticos como Alberto
Ruiz-Gallardón o Rodrigo Rato, que en 2002 parecían
estar en lo más alto de su carrera política y que
además su grado de conocimiento era muy superior al
de Esperanza". (...) "Se puede concluir, por tanto,
que tras los resultados de estas encuestas, la
Comunidad se podía perder o ganar por la mínima con
Gallardón y que el Ayuntamiento no era tierra
conquistada, como se pensaba, ni con Alberto, ni con
Mercedes [de la Merced], ni con Rato, ni mucho menos
con Álvarez del Manzano; porque sólo con Esperanza
Aguirre el PP conseguía una cómoda mayoría
absoluta".
Ruiz-Gallardón ganó la alcaldía y Simancas, la
Comunidad, aunque la fuga de Tamayo y Sáez
dio un vuelco a la Asamblea. "La primera faena fue
cuando nos enteramos de que la noche anterior al 10
de junio él ya sabía lo que iba a pasar y no nos
dijo nada. Luego, se levantó y se marchó cuando
habló Tamayo", cuenta Aguirre.
Tampoco
le perdona a Ruiz-Gallardón que fuera presidente y
alcalde a la vez hasta que se convocaron unas nuevas
elecciones. "Alberto tenía que haber dejado a Luis
Eduardo Cortés [vicepresidente] de presidente en
funciones en la Comunidad, pero le cesó, al igual
que a Luis Peral y a Nacho Echániz, que habían
concurrido conmigo en las elecciones. La ley prohíbe
terminantemente que el presidente de la Comunidad de
Madrid tenga ningún otro cargo, pero como él era
Dios mandó hacer un informe ad hoc". También
hay referencias a la orientación política de
Ruiz-Gallardón: "Él quiere hacer creer a todo el
mundo que representa el centrismo y yo, lo más
rancio y conservador de la derecha".
La
presidenta, en su biografía autorizada, también
detalla algunas situaciones como la vivida en el
último congreso nacional del PP. Según Aguirre,
Ruiz-Gallardón ocupó durante las sesiones uno de los
sitios reservados al llamado politburó a
pesar de no pertenecer a él. Esperanza, al darse
cuenta, le envía un mesaje de móvil: "Pero, ¿qué
haces ahí?". Ruiz-Gallardón responde que le ha
puesto allí Aznar, a lo que Aguirre contesta: "Ni
harto de vino te pone Aznar a ti en ese sitio".
En el
libro se recogen los desencuentros de los políticos
del PP cuando Aguirre decidió presentarse a la
presidencia de su partido en Madrid. En una cena,
"Alberto estaba enfadado cuando comenzó a decirme
que cómo se me ocurría presentarme si tenía menos
votos que él. Ante su creciente indignación, decidí
tomarme las cosas con mucha calma. Lo que más le
molesta a Gallardón es que yo no me altere con sus
amenazas. Terminó diciéndome que si yo era
presidenta del partido, él no se presentaba a las
elecciones municipales de 2007".
ASÍ
VE AGUIRRE A GALLARDÓN
- "Las encuestas señalaban un margen
mayor de victoria para Alberto en el
Ayuntamiento que en la Comunidad"- "Tras
conocer los resultados, hay quien
entiende que Aznar no podía permitirse
el lujo de que su supuesto mejor alfil
cayera a manos de un candidato
socialista apenas conocido por el 34% de
los madrileños"- "Gallardón terminó la
cena diciéndome que si yo era presidenta
del partido él nose presentaba a las
elecciones municipales de 2007"- "Él
quiere hacer creer a todo el mundo que
representa el centrismo y yo, lo más
rancio y conservador de la derecha"- "Lo
que más le molesta a Gallardón es que yo
no me altere con sus amenazas"- "Alberto
tenía que haber dejado a Luis Eduardo
Cortés de presidente en funciones en la
Comunidad de Madrid, pero le cesó, al
igual que a Luis Peral y a Nacho Echániz,
que habían concurrido conmigo en las
elecciones. La ley prohíbe
terminantemente que el presidente de la
Comunidad tenga ningún otro cargo, pero
como él era Dios mandó hacer un informe
ad hoc". - "La primera faena fue
cuando nos enteramos de que la noche
anterior al 10 de junio él ya sabía lo
que iba a pasar y no nos dijo nada.
Luego, se levantó y se marchó cuando
habló Tamayo". www.elpais.es 23.11.06
Gallardón asegura que leerá
la biografía de Esperanza Aguirre después de las elecciones
El
alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha dicho que tiene en su mesa
la biografía autorizada de la presidenta regional, Esperanza Aguirre, no
ha querido confirmar si asistirá o no a su presentación, y mantiene que
aún no lo ha leído: lo hará “el 28 de mayo del año que viene” porque
ahora está muy ocupado preparando las elecciones. Aguirre ha negado hoy
haber dicho, como aparece en el libro, que con su sueldo no llega a fin
de mes. La
presidenta de la Comunidad de Madrid ha desmentido hoy “absoluta y
totalmente” que “muchas veces no llegue a fin de mes” con su sueldo,
como se asegura en el libro. “Yo no he dicho eso. Me siento una
privilegiada y desde luego estoy encantada en la política”, ha añadido.
El libro
se titula Esperanza Aguirre, la presidente y lo ha escrito
Virginia Drake con la autorización de la presidenta regional. A su
presentación ya ha confirmado que no acudirá el vicealcalde y mano
derecha de Gallardón, Manuel Cobo. Gallardón, por su parte, no lo ha
leído ni lo hará hasta el año que viene: “Hasta entonces estamos todos
preparando las próximas elecciones” autonómicas y municipales, ha dicho.
En la
página 479 del libro se pone en boca de Aguirre esta frase: “No tener
pagas extras me tiene mártir, las he tenido toda mi vida y las echo de
menos en Navidad y en verano. No es que haga números a final de mes; es
que muchas veces no llego, con la excepción de cuando fui presidenta del
Senado”. La presidenta de la comunidad gana 100.743 euros al año, es
decir, 8.395 al mes.
Para
Rafael Simancas, líder de los socialistas madrileños y candidato de su
partido a arrebatarle el cargo a Aguirre el año que viene, se trata de
una “frivolidad” por la que tendría que disculparse ante los ciudadanos,
en especial ante jóvenes y ancianos. Según la diputada de Izquierda
Unida Margarita Ferré, “la señora presidenta delira”, pues no distingue
entre realidad y ficción. “A este paso es capaz de pedirnos un asistente
social para el palacete”, ha añadido.
www.elpais.es 22.11.06
"SOBRE EL 11M Quienes digan los jueces
que son los responsables, serán los responsables, y eso será plenamente
apoyado por el PP"
Yo
miro hacia el futuro no hacia el pasado. En
estos momentos quien construye el discurso del
partido es Rajoy. Y Mariano ha hecho una apuesta
clara por hacer un partido muy centrado, que no
tenga la más mínima tentación de caer en el
radicalismo ni en las exageraciones ni en las
exclusiones.
Cómo
no me voy a sentir querido en una casa que fundó
mi padre? ¿Cómo no me voy a sentir querido en
una casa en la que yo estoy afiliado desde el
mismo día de su fundación? ¿Cómo no me voy a
sentir querido en una casa en la que desde el
día que llegué dije que teníamos que abrir las
puertas a los que antes militaban en otros
partidos políticos, entre ellos Esperanza
Aguirre, a la que contribuí a convencer como a
Álvarez del Manzano para que, desde sus
distintas militancias iniciales, se involucrasen
en nuestro proyecto? ¿Cómo no me voy a sentir
querido en una casa donde cuando entro en Génova
13 —edificio por cierto que yo alquilé para ser
la sede del PP— reconozco hasta a la señora de
la limpieza?
La
extrema derecha, intransigente o radical, que no
hace otra cosa que convertirse objetivamente en
un colaborador de la izquierda socialista y por
lo tanto favorecer las expectativas del PSOE, no
está en el PP. De ninguna de las formas. Y les
gustaría mandar en el PP y que hiciéramos lo que
ellos quieren. Pero ni lo hemos hecho ni lo
haremos nunca en el Partido Popular.
Pues
una confianza absoluta en el Estado de Derecho,
y por lo tanto en aquellos a los que les
corresponde la investigación de hechos
criminales, es decir, a los jueces. Nuestra
confianza en el poder judicial es absoluta. hay
un sumario que se ha cerrado, un juicio oral y
quienes digan los jueces que son los
responsables, serán los responsables, y eso será
plenamente apoyado por el PP. (Alberto Ruiz
Gallardón.08.10.06.ABC)
El Arzobispado de Madrid
reprocha a Gallardón que case a una pareja gay
El Arzobispado de
Madrid ha recordado hoy al alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, que mañana
casará a una pareja de homosexuales, que el matrimonio sólo puede ser contraído
por personas de distinto sexo. Además, le advierte de que la doctrina de la
Iglesia obliga a todos los fieles católicos, incluidos "los políticos
católicos". Por su parte, el secretario general del Grupo Popular ha señalado
hoy que este "desafío" debe tener "consecuencias políticas".En una nota de
prensa, el Arzobispado ha dicho que "el matrimonio no puede ser contraído más
que por personas de diverso sexo: una mujer y un varón", como expuso Benedicto
XVI en el V Encuentro Mundial de las Familias celebrado en Valencia. "La verdad
sobre el matrimonio debe ser respetada y promovida por la legislación civil y no
son aceptables ni las equiparaciones de las llamadas uniones homosexuales con el
verdadero matrimonio, ni mucho menos una definición legal del mismo, como ocurre
en la vigente legislación española", explica la institución eclesiástica en el
comunicado.Para el Arzobispado, la legislación permite que el matrimonio "deje
de ser considerado jurídicamente como la unión del hombre y la mujer quedando
así vaciado de su valor y de su contenido insustituible para el bien común, que
exige como base ineludible el verdadero matrimonio y la familia"."Esta doctrina
obliga a todos los fieles católicos, incluidos los políticos católicos según la
responsabilidad que les es propia, a tener especialmente presente que todo
reconocimiento legal, teórico y práctico de las llamadas uniones homosexuales
contribuye a ofuscar valores fundamentales que no sólo pertenecen a los
creyentes, sino al patrimonio común de la Humanidad", concluye el Arzobispado de
Madrid.
Gallardón celebrará su primera boda
gay con la ausencia de dirigentes del PP
Alberto Ruiz
Gallardón celebrará mañana su primera boda homosexual: la del militante del PP
Javier Gómez y su novio, Manuel Ródenas. A la ceremonia no acudirán ni la ex
ministra Ana Pastor -miembro de la Ejecutiva del partido- ni Esperanza Aguirre,
presidenta de la Comunidad y del PP de Madrid, ambas invitadas. El concejal
socialista Pedro Zerolo ha tachado la iniciativa del alcalde de "oportunista e
hipócrita", mientras la asociación estatal de gays reclama al PP que retire el
recurso de inconstitucionalidad contra la ley que permite las bodas
homosexuales.Además y por su parte, el diputado del PP y secretario general del
Grupo Popular en el Congreso, Jorge Fernández Díaz, acusó hoy de "desleal" al
alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, por anunciar su intención de oficiar
una boda entre homosexuales este fin de semana. A su juicio, este "desafío" del
primer edil madrileño "debe tener consecuencias políticas".Fernández Díaz
recordó que el PP votó en contra de la ley que permite el matrimonio entre
personas del mismo sexo y también ha presentado un recurso de
inconstitucionalidad, por lo que el alcalde "tiene la obligación de ser leal con
su partido, sea o no católico"."El señor Ruiz Gallardón, que es un dirigente
destacado del Partido Popular, tiene que ser leal al partido, con independencia
de que sea católico, mahometado o mormón. Ese es su problema, pero tiene la
obligación de ser leal con su partido y acatar sus decisiones", enfatizó.En este
sentido, Fernández Díaz insistió en que si finalmente el alcalde madrileño
oficia esta boda homosexual irá "en contra de la decisión adoptada por los
órganos de gobierno del PP", lo que constituiría "una profunda deslealtad" que
"desde luego debe tener consecuencias políticas".Alberto Ruiz-Gallardón
celebrará mañana su primera boda homosexual: la del militante del PP Javier
Gómez y su novio, Manuel Ródenas. A la ceremonia no acudirán ni la ex ministra
Ana Pastor -miembro de la Ejecutiva del partido- ni Esperanza Aguirre,
presidenta de la Comunidad y del PP de Madrid, ambas invitadas. El concejal
socialista Pedro Zerolo tachó ayer la iniciativa del alcalde de "oportunista e
hipócrita". La asociación estatal de gays reclamó al PP que retire el recurso de
inconstitucionalidad contra la ley que permite las bodas homosexuales.
Javier Gómez,
coordinador del Grupo de Lesbianas y Gays del PP, y Manuel Ródenas, responsable
del programa de asesoramiento para gays de la Comunidad de Madrid, no tendrán
una boda como la que vivieron hace tres meses el concejal de Cultura de Orense,
José Araújo, del PP, y su novio. A aquel enlace acudió la plana mayor del
partido en Galicia; a éste han declinado asistir la presidenta del PP madrileño,
Esperanza Aguirre, y otros señalados dirigentes populares.
Gómez y Ródenas
han llevado la preparación de su enlace con sigilo. Los invitados no iban a
saber hasta dos días antes el lugar y el día. "Es algo íntimo y los medios no
están invitados", contaba ayer Ródenas, tras publicar el diario El Mundo
la fecha de la celebración. "No sabemos quién lo ha filtrado. Prefiero no pensar
en la posibilidad de que haya sido el partido. Pero, una vez conocido, hemos
preferido contarlo", reconocía.
Fuentes del
entorno de los novios indicaron que desde la dirección del PP se ha
desaconsejado la asistencia de los miembros del partido invitados, algo que
Ródenas negó.
Entre esos
invitados están Esperanza Aguirre y la ex ministra Ana Pastor, además de Rodrigo
Rato, que se encuentra fuera de España. Aguirre explicó: "Me alegro mucho por
ellos, pero no puedo ir. Me había comprometido antes para asistir a la boda de
José Ignacio Echániz [ex consejero de Sanidad] en Salamanca . Les he mandado un
regalo, unas mesas para la casa, que es el regalo que hago en todas las bodas.
También he hablado con ellos".
A la pregunta de
si hay alguna indicación del PP para que no asistan los dirigentes del partido,
la presidenta respondió: "No lo sé, lo que no creo es que les haya gustado que
les case Alberto [Ruiz-Gallardón]". Aguirre fue la única voz del PP que
públicamente se mostró en contra del recurso presentado por la dirección de su
partido ante el Tribunal Constitucional contra la ley que permite el matrimonio
homosexual. El alcalde se ha limitado a señalar que, aun recurrida, esa ley está
en vigor y "hay que cumplirla".
Por su parte, Ana
Pastor explicó que recibió la invitación el 19 de julio. "Pero llamé a Javier
para comunicarle que no podría asistir porque en esas fechas estaría en
Galicia", señaló.
Francisco
Granados, secretario regional del PP, desmintió que haya habido consignas de
Génova. "Les he mandado un regalo y he estado con ellos, pero me marcho a
Marbella este fin de semana", dijo. Quien sí asistirá es Luis Asúa, concejal del
distrito Centro y único invitado del equipo de gobierno, según un portavoz
municipal.
El socialista
Pedro Zerolo exigió ayer "coherencia" a Gallardón para que "retire de inmediato
el recurso interpuesto por el PP", ya que, de lo contrario, "su decisión de
oficiar la ceremonia no puede ser calificada sino de oportunismo político".
"Nosotros aprobamos las leyes a las que el PP se opone, y luego ellos las usan",
subrayó.
La presidenta de
la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales, Beatriz
Gimeno, afirmó que los miembros del PP que vayan a la boda, incluido el alcalde,
estarán incurriendo "en un acto de hipocresía política". Eso sí, excluyó al
propio Javier Gómez: "Es un amigo y un activista gay. Ha hecho mucho para que se
pueda ejercer este derecho".
Publicado en
www.elpais.es
28.07.06
El 'número dos' de Aguirre acusa a
Gallardón de "dejarse utilizar por el Gobierno de Zapatero"
El
vicepresidente de la Comunidad de Madrid, el popular Ignacio
González, ha arremetido, en declaraciones al diario
ABC,
contra el alcalde de la capital, Alberto Ruiz Gallardón, de su mismo
partido, pidiéndole “que no se deje utilizar tanto por el Gobierno
de la Nación, que sólo intenta dividir al PP y aislar la Comunidad”,
en referencia a la entrevista que hace poco mantuvieron la ministra
de Fomento, Magdalena Álvarez, y Ruiz-Gallardón para hablar de la
infraestructuras de Madrid y a la que no asistió Aguirre.
En lo que
supone un nuevo roce entre el Gobierno regional y el consistorio madrileño,
González ha asegurado que "el problema de fondo es qué pinta el alcalde de
Madrid para hablar de las infraestructuras de la región o el cierre de la
M-50". No obstante, el vicepresidente primero de la Comunidad ha destacado
que entre Aguirre y Ruiz-Gallardón no existe una mala relación, sino "sólo
situaciones de conflicto generadas por la defensa de los intereses de cada
institución, pero no son enfrentamientos personales".
El periódico
ABC asegura que el malestar del Ejecutivo de Aguirre se debe a la
actitud de Ruiz Gallardón al reunirse con varios miembros del Gobierno
socialista, en una imagen de cooperación y diálogo que contrasta con la
oposición rotunda que esta llevando a cabo el equipo de Gobierno de
Esperanza Aguirre. Un motivo más para la discordia es la cena que
compartieron representantes de los sindicatos, el presidente de la Cámara de
Comercio - Fernando Fernández Tapias- y el alcalde en la víspera de la gran
manifestación de pacientes y personal médico que pidieron la dimisión del
consejero Lamela el 21 de abril. Según ABC, fuentes del Gobierno regional
sostienen que en aquel encuentro los sindicatos escucharon "más de una
recomendación" para que la manifestación tuviera éxito.
Las
declaraciones se producen en el mismo día en el que los trabajadores se
manifiestan por el Primero de Mayo con la crisis del hospital Severo Ochoa
como uno de sus ejes principales y un día antes de que en la Casa de
Correos, sede del gobierno regional, se celebre el acto central del día de
la Comunidad, actos a los que asistirán la presidenta, el alcalde y la
vicepresidenta primera del Ejecutivo.
Desde la
oposición. el líder del PSOE en Madrid, Rafael Simancas, y la portavoz
municipal socialista, Trinidad Jiménez, han lamentado que el
"enfrentamiento" entre la presidenta y el alcalde repercute en los
"intereses de los madrileños". En este sentido, Simancas ha considerado que
ambos políticos están pasando "de la categoría de la anécdota a la
confrontación institucional", y ha pedido al PP "un ejercicio de mesura y de
sentido común para que dejen sus enfrentamientosPublicado en El País.
01.05.05
El vicepresidente
regional advierte al alcalde de que para ser candidato precisa la
bendición del PP
El vicepresidente
primero y presidente del Comité Electoral del PP de Madrid, Ignacio González,
dijo ayer que le parece bien la "disponibilidad" del alcalde de Madrid, Alberto
Ruiz-Gallardón, a querer repetir en su puesto en las elecciones de 2007, pero
recordó que es el partido el que "bendice a los candidatos". González concluyó:
"Me parece muy bien la disponibilidad, pero será el partido el que decidirá
quiénes son los candidatos a las distintas instituciones".
El alcalde
aseguró horas antes, en una entrevista en Telecinco, que si los madrileños
quieren, seguirá en el cargo después de 2007 porque necesita dos legislaturas
para "coronar" proyectos que sitúen a la ciudad en el "liderazgo que le
corresponde", en España y en Europa. Gallardón llegó al Ayuntamiento de Madrid
tras los comicios de mayo de 2003.
Gallardón
argumentó: "En una legislatura se inician muchos proyectos que se coronan en dos
y, en principio, mi intención sería terminar ese proceso de transformación
fabulosa que está viviendo nuestra ciudad para ocupar el espacio y el tiempo de
liderazgo que le corresponde a Madrid no sólo dentro de España, sino dentro de
Europa, y que eso requiere dos legislaturas".
En la entrevista,
el alcalde también reconoció que ETA es "el único problema" de la candidatura
olímpica que, hoy por hoy, según aseguró, es la mejor, por encima incluso de su
principal competidora, París, al haber superado los escollos de pruebas
deportivas y plazas hoteleras que sumaba puntos a favor de la ciudad francesa.
La candidatura
olímpica Madrid 2012 y la reforma de la M-30 son dos de los grandes proyectos
que el alcalde querría continuar en caso de presentarse finalmente a la
reelección.( Febrero 2005 )
Aguirre se
muestra "preocupada" por la ley ideada por Gallardón para lograr más dinero
Es una ley muy
importante, que afecta a la arquitectura institucional. Por eso, estoy
preocupada. Antes de ser aprobada, esta ley debe ser debatida por los grupos
políticos, igual que se ha hecho en Cataluña con la ley especial para
Barcelona", declaró ayer Esperanza Aguirre, del PP, presidenta de la Comunidad
de Madrid, sobre el proyecto de Ley de Régimen Especial de la Ciudad de Madrid
del alcalde Alberto Ruiz-Gallardón. PSOE e IU, que están de acuerdo en la
conveniencia de un régimen especial para Madrid, coinciden en que debe ser fruto
de un amplio consenso.
Gallardón, del PP,
quiere que el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero impulse una
Ley de Régimen Especial de la Ciudad de Madrid que supondría dotar al
Consistorio de muchos más recursos y más capacidad recaudatoria. "Lo que
queremos es más dinero para Madrid. Pero eso no supone ninguna merma para la
Comunidad porque no quitamos nada a la Comunidad", afirmó un miembro del equipo
de Gallardón.
Aguirre, que ayer
se mostró muy moderada, rehusó opinar a favor o en contra del proyecto de su
compañero Gallardón. "Es un tema que afecta a los fundamentos básicos de la
organización territorial. Por eso, voy a convocar al PSOE y a IU para debatirlo.
Es algo que tenemos que acordar todos los grupos, porque no puede hacerse a
espaldas de la Asamblea", declaró.
La presidenta
regional se expresaba en esa línea en una carta enviada el pasado viernes al
líder de los socialistas madrileños, Rafael Simancas, aceptando la propuesta de
éste para debatir el modelo territorial, la reforma del Estatuto y otros
asuntos. Al referirse al plan de Gallardón, Aguirre confiaba a Simancas: "Dado
que en dicho texto se contienen aspectos que afectan a cuestiones básicas de la
Comunidad, que me preocupan, y a la vista de los primeros informes que me han
hecho llegar los servicios de la esta Comunidad, creo que debemos aprovechar la
oportunidad para alcanzar un acuerdo político general sobre el mismo, y poder
contribuir así conjuntamente a su mejor contenido".
Tras conversar
con Aguirre, el portavoz del PP en la Asamblea, Antonio Beteta, dijo: "Esta ley
afecta al Estado, a la Comunidad y al Ayuntamiento, y tiene que ser negociado
por los tres. Hasta este momento, la Comunidad ha estado incomprensiblemente
ajena a este asunto, que aparentemente ya está cocinado. Pero deben intervenir
en este proyecto todos los grupos (PP, PSOE e IU) de la Asamblea".
Simancas se
mostró a favor de una ley especial para la ciudad de Madrid "porque así está
contemplado en el artículo 6 del Estatuto de autonomía y en el programa
electoral del PSOE". Según Simancas, esta ley "tiene que reconocer el papel
institucional de la ciudad de Madrid y darle compensaciones por los gastos que
le supone ser capital del Estado". "Pero la elaboración y promulgación de esta
norma", agregó, "tiene que hacerse al margen de un enfrentamiento entre
Gallardón y Aguirre".
Gallardón
sostiene que esta ley especial para Madrid tendría carácter estatal y que son
las Cortes las encargadas de aprobarla, a propuesta del Gobierno central. "Es el
mismo trámite que ha seguido la carta municipal de Barcelona, que será aprobada
en breve. Es lo mismo", remacha un colaborador de Gallardón. Pero Ignacio
González, vicepresidente primero de la Comunidad, sostiene: "Queremos que se
haga como lo de Barcelona, donde se formó una comisión tripartita (Generalitat,
Ayuntamiento y Gobierno central) y donde se discutió el tema durante mucho
tiempo". Simancas sostiene: "Hay que debatir la ley en el Ayuntamiento, luego en
la Asamblea y por último en las Cortes".
Trinidad Jiménez,
portavoz socialista en el Ayuntamiento, recalca: "El PSOE tiene el compromiso de
hacer una ley de capitalidad para Madrid. Es decir, ley de capitalidad, sí; pero
no se puede hacer de forma apresurada y sin consenso político. Sería inadmisible
que saliera adelante sin un gran acuerdo. Llama la atención que Gallardón rehúse
el debate y ahora quiera ir tan rápido". Tras criticar que la ley diseñada por
Gallardón tiene "un enfoque financiero" y centrado en obtener más dinero,
Jiménez pretende que sirva para replantearse el papel de las corporaciones
locales. Inés Sabanés, portavoz municipal de IU, opina: "Estamos de acuerdo en
una ley que suponga que el Ayuntamiento tenga mayores competencias, pero debe
ser una ley resultante del consenso, no del conflicto". En opinión de Sabanés,
la norma proyectada por Gallardón supondría que "Madrid se convertiría en un
foco muy importante, en detrimento del resto de la región". La portavoz de IU
tiene "reservas insalvables" sobre el modelo de relaciones
Ayuntamiento-Comunidad-Gobierno central ideado por el alcalde del PP: "En la
Comisión General de Coordinación que figura en el proyecto de Gallardón sólo
estarían ahora el PP y el PSOE, lo que supondría la laminación de la oposición".Publicado
en El País.30.01.05
El "número dos" de Gallardón
pide al PP que no siga "políticas talibanes"
El
vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, pidió hoy al presidente del PP, Mariano
Rajoy, que no permita que se extienda en el partido la "política talibán" y
el "encanallamiento" del que aseguró haber sido víctima en los últimos días,
desde que anunció su candidatura a la Presidencia regional de su formación.
Cobo hizo
estas declaraciones en una rueda de prensa celebrada en el Ayuntamiento en
la que anunció que sólo la "presión personal y moral" de Alberto
Ruiz-Gallardón, a quien profesa una enorme "lealtad", ha evitado que
cumpliera su voluntad de "dimitir como concejal y dejar la vida política"
tras constatar que la defensa de su candidatura ponía en "peligro" al PP.
Aunque reconoció
que la candidatura de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza
Aguirre, "demostró, incluso con exageración", el claro apoyo de la estructura
del PP", su intención de dimitir y retirarse de la política fue la
"manifestación de rencor, de odio y de encanallamiento" que constató en la
reunión de la dirección regional del partido el pasado mièrcoles.
Explicó que pese
al apoyo manifestado mayoritariamente a Aguirre, en ocasiones por personas que
luego le pidieron "perdón por ser cobarde", podría haber seguido adelante
incluso en minoría, pero que "no era posible" por los modos de dicha reunión, y
que resumió en los "mensajes injuriosos" enviados a travès de móviles y en los
intentos de "pasar facturas o saldar viejas cuentas".
En esa situación,
y dejando claro que no acusaba a la candidatura de Aguirre pero sí a
"determinadas personas que siguen políticas e instrucciones talibanes", su
equipo decidió retirarse para no entrar "en este tipo de actitudes y de
descalificaciones, porque eso sí hubiera significado romper el partido".
En todo caso,
Cobo, que se permitió finalizar su comparecencia pidiendo a los ciudadanos que
"ejerzan su libertad de criticar y procuren que el odio, como dicen todas las
confesiones religiosas, no anide en los corazones", opinó que "el rencor y el
odio demuestran que teníamos razón, aunque fuèramos menos".
Aunque se le
pidió varias veces que precisara quièn estaba detrás de esas "instrucciones
talibanes", a los que repetidamente denominó "ultras" -en el sentido deportivo
de la palabra, aclaró, con la connotación de "exagerados en el odio al rival"-,
prefirió no hacerlo y limitarse a puntualizar que están "fuera del partido".
Puso como ejemplo
que se le haya criticado ser amigo, comer y hasta jugar al mus con personas del
grupo PRISA, así como participar en actos con líderes socialistas, entre ellos
el presidente del Gobierno, Josè Luis Rodríguez Zapatero, "al que respeto
-comentó- y que desearía que fuera del Partido Popular".
La presidenta de
la Comunidad y candidata a encabezar el PP de Madrid, Esperanza Aguirre, fue
preguntada por los periodistas sobre su opinión acerca de las declaraciones del
vicealcalde.
La presidenta
insistió una y otra vez en que "hoy no toca" hablar de la política en el PP de
Madrid, ni de la composición de la lista con la que concurrirá al congreso
regional de noviembre.
La candidata a la
presidencia del PP de Madrid se rió cuando se le pidió su opinión sobre el
tèrmino "talibanes" empleado por Cobo y se limitó a decir sobre el vicealcalde
que "tengo el máximo respeto por el señor Cobo".
(*) Publicado en la edición digital de la Cadena
Ser.
15.10.04
Gallardón
se da por vencido y renuncia a luchar con Aguirre por el control de Madrid
"No hemos sido derrotados,
pero hemos sido vencidos". Citando a Hemingway anunció ayer Alberto
Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid, su renuncia y la de su número dos,
Manuel Cobo, a competir por la presidencia del PP en Madrid frente a
Esperanza Aguirre. Ruiz-Gallardón afirmó que se ha dado cuenta de que su
proyecto está "en minoría casi absoluta" en la dirección de su partido y
agregó que el modelo que ha triunfado es el de quienes "han optado por la
exclusión, que son los que apoyan a Esperanza Aguirre". "Hemos perdido, y lo
que tenemos que hacer es retirarnos", sentenció el alcalde. La presidenta
autonómica agradeció el gesto y aseguró que va a contar mucho con
Ruiz-Gallardón si es elegida presidenta del PP-Madrid.
El enfrentamiento abierto entre
el alcalde de Madrid y la presidenta de la Comunidad ha durado exactamente una
semana. Siete días en los que partidarios de ambos dirigentes populares se han
cruzado gruesas acusaciones hasta obligar a intervenir a la dirección nacional
del PP, que optó desde el primer momento por respaldar a Aguirre aunque
apostando oficialmente por la "integración" de las candidaturas. Esa integración
se reveló imposible cuando Ruiz-Gallardón reclamó que el futuro secretario
general del PP-Madrid fuera Manuel Cobo y Aguirre se negó.
La reunión de la Junta Directiva
Regional del PP el miércoles por la noche acabó por dar el golpe de gracia a los
partidarios del alcalde: menos de una decena de los más de 300 vocales presentes
pidieron la palabra para defender a Cobo, mientras que Aguirre cosechaba más de
60 apoyos. Ayer, Ruiz-Gallardón se presentó con gesto grave ante los periodistas
para contar el final de una aventura iniciada "con mucha ilusión" y muy poca
fortuna.
"Hemos constatado que estamos en
minoría casi absoluta. La Junta Directiva es un reflejo de la situación del
partido, y nosotros sólo contamos con el apoyo de una minoría de sus
representantes. En política no hay que recurrir a eufemismos: unas veces se
gana, otras se empata y otras se pierde. Nosotros perdimos", afirmó.
El alcalde quiso
agradecer su apoyo a quienes han defendido públicamente la candidatura de Cobo
sin importarles la "presión" ejercida por "la postura más o menos oficial". Y
subrayó que "otro grupo, el mayoritario, el que apoyó a Esperanza Aguirre, optó
claramente por la exclusión" y finalmente ha ganado el pulso. El secretario
general del PP, Ángel Acebes, advirtió el pasado sábado, tras el anuncio de la
candidatura del número dos de Ruiz-Gallardón, de que "los personalismos
no salen gratis".
"Es el momento de
reconocer que hemos perdido, y lo que tenemos que hacer es retirarnos.
Presentamos este proyecto porque creíamos en él, porque nos ilusionaba y porque
pensábamos que era lo mejor para el PP. Pero no sólo ha sido mayoritariamente
rechazado por la dirección del partido, sino que ha sido severamente criticado.
Esperanza Aguirre tendrá las manos libres a partir de ahora como presidenta del
PP en Madrid", concluyó el alcalde.
Antes había
explicado, a preguntas de los periodistas, que la reunión de la Junta Directiva
Regional fue "muy tensa" y que en ella se vertieron "juicios tremendamente
injustos" sobre Manuel Cobo. Respecto a los mensajes plagados de
descalificaciones a Ruiz-Gallardón que llegaron durante toda la noche a los
teléfonos móviles de varios dirigentes y militantes del PP ("Gallardón-Cobo,
Polanco y la SER quieren dinamitar la unidad del Partido Popular para hundir a
Rajoy. Tenemos que impedirlo. No te pares... Pásalo", rezaba uno de esos
mensajes), el alcalde se limitó a decir que quiere confiar en que no fueran
lanzados desde el entorno de Esperanza Aguirre. Y añadió: "Han circulado muchas
infamias estos días. Pero hay algo que tengo muy claro desde siempre: yo podré
seguir en política o no, pero nunca haré política fuera del PP".
Lo que no dejó
claro es cuáles serán las "consecuencias de la derrota": "¿Si volveré a
presentarme como candidato a la alcaldía en 2007? Sinceramente, no lo sé. Y creo
que es lógico que no lo sepa. Es muy pronto, faltan años. Yo tengo un compromiso
con los madrileños hasta mayo de 2007. Después no sé", dijo.
Tras conocer las
palabras de Alberto Ruiz-Gallardón, Esperanza Aguirre le agradeció su "sentido
de la responsabilidad y de la democracia" y aseguró que piensa "contar mucho con
él" y que su candidatura será "generosa" con Manuel Cobo en el congreso regional
del PP del próximo mes. Ruiz-Gallardón "ha demostrado que representa algo que,
si no es mayoritario, sí es muy importante y enriquecedor para el PP", opinó
Aguirre.
La presidenta
explicó que, nada más conocer la noticia de que Cobo retiraba su candidatura,
envió por teléfono móvil un mensaje escrito al alcalde informándole de que iba a
estar ocupada en el pleno del Parlamento regional y emplazándole a hablar por la
noche, una vez terminada la sesión plenaria. Aguirre agregó: "Nadie pierde,
nadie es perdedor". Y a continuación agradeció los "apoyos" que recibió la
víspera en la Junta Directiva regional y los que le han brindado todos estos
días de conflicto los "militantes" de su partido.
Por su parte, la
dirección regional del PP de Madrid emitió un comunicado en el que pide que, una
vez retirada la candidatura de Manuel Cobo, se elabore una lista "única e
integradora", y apela a "la generosidad" de Esperanza Aguirre "a la hora de
elaborar [una] candidatura en la que todo el mundo se sienta representado".
Asimismo, asegura que el alcalde de Madrid "es un gran activo del partido" y que
"todo el mundo desea seguir contando con él". El comunicado insiste en que, "en
línea con lo expresado por el actual presidente regional, Pío García-Escudero,
cuando anunció que no optaría a la reelección", la lista que concurra al
congreso de los próximos 27 y 28 de noviembre debe ser "una candidatura de
unidad, donde todo el mundo se sienta cómodo".
Antonio Beteta,
portavoz del PP en la Asamblea de Madrid y que fue durante años consejero y
hombre de confianza de Ruiz-Gallardón cuando éste era presidente de la
Comunidad, consideró ayer "una muy buena noticia para todos los militantes" de
su partido la retirada de la candidatura de Cobo. Beteta auguró que Esperanza
Aguirre elaborará finalmente "una lista de integración".
Manuel Cobo, que
permaneció en su despacho del Ayuntamiento mientras el alcalde anunciaba su
retirada, guardó silencio durante todo el día.(El País.15.10.04)
La noche más
tensa en el PP de Madrid
Fue como una
interminable sesión de terapia de grupo con cuatro tipos de intervenciones: los
poquísimos concejales de Alberto que apoyaron a [Manuel] Cobo; una avalancha de
críticas contra ambos por intentar apropiarse del centro y decir que los demás
somos unos derechistas insoportables; un buen número de quejas de representantes
de pueblos en los que gobierna el PSOE por los desplantes que les hizo Alberto
cuando era presidente de la Comunidad de Madrid, y un grupo menor que pedía, por
el bien del partido, una lista de integración". Éste es el resumen de un
diputado madrileño afín a Esperanza Aguirre que estuvo de oyente durante las
cinco horas que duró, en la noche del miércoles, la Junta Directiva Regional del
PP de Madrid, en la que participaron 330 personas, apelotonadas en una sala de
la sede de la calle de Génova en la que difícilmente caben 200.
Una militante de Nuevas Generaciones, las juventudes del PP, mantiene que la
noche fue "totalmente inédita en la historia del PP porque no es habitual que
haya más de 70 peticiones de palabra y nunca habíamos tenido dos candidaturas a
la presidencia regional del PP". Según esta joven popular, "sólo hubo tensión en
las primeras cuatro o cinco intervenciones". Después, añade, "cada uno dijo cómo
veía las cosas con total sinceridad pero también con todo respeto a los
compañeros del partido".
En esa larga noche -la reunión comenzó a las 19.30 y concluyó pasada la
medianoche- hubo 76 peticiones de palabra y sólo ocho expresaron su apoyo a la
candidatura de Manuel Cobo. Lo hicieron los concejales Pedro Calvo, Pilar
Martínez, Paz González, Patricia Lázaro y José María Berzal; el consejero
delegado de Economía, Miguel Ángel Villanueva; el portavoz del PP en Torrejón
Pedro Rollán, y el diputado regional Javier Rodríguez.
De esas intervenciones de apoyo a Cobo, la más moderada, según varios asistentes
a la reunión, fue la de Villanueva, ex número dos de la lista de Aguirre y su
jefe de campaña en las elecciones de mayo de 2003. Y la más criticada por sus
correligionarios, siempre según asistentes a la reunión, fue la de Pilar
Martínez. Ésta puso en duda la limpieza del proceso de elección interna, al
punto que el aún presidente del PP de Madrid, Pío García-Escudero, pidió la
palabra para recriminárselo y enfatizar que el suyo es un partido democrático.
Martínez comparó además "lo que se le está haciendo a Alberto con la soberbia y
los malos modos que llevaron a perder las elecciones el 14 de marzo".
La comparación desató un sonoro murmullo que, según asistentes a la reunión, se
resumía en la cara que puso Ana Botella, concejal del ayuntamiento y esposa del
ex presidente del Gobierno José María Aznar. Botella estaba sentada en las
primeras filas y no intervino en el debate. El fin de semana había asegurado que
"no se reconocía" en un PP enfrentado por dos candidaturas.
La también concejal de Gallardón Paz González apostilló el discurso de Martínez
con la afirmación de que se "intenta acabar con el sector de Gallardón". Y el
edil Pedro Calvo afirmó que, en esa noche, "algunos elogios" no estaban "siendo
sinceros".
El diputado Javier Rodríguez defendió la iniciativa de Manuel Cobo y pidió la
unidad. Esa unidad fue defendida también por la edil Nieves Sáenz de Adana,
quien reclamó que, de lograrse, "vuelva Pío a la presidencia".
Las intervenciones más críticas a la candidatura de Cobo, según fuentes del PP
de Madrid, estuvieron protagonizadas por los diputados autonómicos Luis Eduardo
Cortés, Juan Van Halen y Antonio Beteta. Los tres son ex colaboradores de
Gallardón en su etapa en la Comunidad y han tenido una intensa relación personal
con él.
Luis Eduardo Cortés, senador y portavoz de Exteriores del PP en la Cámara alta,
dijo: "Mira, Manolo, hay una cosa que ni tú ni yo tenemos, y no digo que Alberto
no tenga, y es la capacidad de conectar con la gente que sí tiene acreditada
Esperanza. Y tú y yo ya somos muy mayores para cambiar".
El también senador y portavoz de cultura Juan Van Halen preguntó: "Hay dos cosas
que no entiendo: ¿Por qué hacen falta dos candidaturas y por qué quien auspicia
la segunda no se presenta? Espero que no sea sólo porque se discutió en una
cena". Van Halen añadió un argumento que gusta mucho en las filas del PP.
Aseguró que "el resultado de esa cena lo conocía la Cadena SER a las 10.30 de la
noche, porque lo dijeron en antena, y a esa hora aún la cena debía de estar por
el primer plato".
Sobre quién es de centro y cómo deben hacerse las cosas, una intervención muy
jaleada fue la del concejal de Vallecas Ángel Garrido, proveniente del CDS y,
como tal, adalid del centro. Utilizó la frase más célebre del discurso de
Ruiz-Gallardón en el último congreso del PP -"Algo hemos debido de hacer mal"-
para asegurar: "Como tú dijiste, Alberto, hacer política requiere identificarse
con los deseos de la gente y hacer política interna exige identificarse con los
afiliados de tu partido. Tú dijiste: 'Algo habremos hecho mal'. Yo te digo: Algo
habréis hecho mal cuando nadie os quiere en este partido".
También sobre el centro, la consejera de la Comunidad Beatriz Elorriaga,
aseguró: "No conozco a nadie de extrema derecha en el PP, y no hay derecho a que
nadie te tilde de derechista y pretenda apropiarse del centro".
El portavoz adjunto del PP en la Asamblea de Madrid, Juan Soler, también mantuvo
que "es poco centrista intentar apropiarse del centro". Y recordó a Gallardón
que él "comenzó en el Ayuntamiento de Madrid como representante de Alianza
Popular, que era la derecha cuando el centro lo representaba José María Álvarez
del Manzano, que provenía de UCD".
El ex alcalde Manzano, mientras, defendió la "integración", pero tras asumir que
Aguirre representa a la mayoría.
Ya en el capítulo de quejas por actuaciones pasadas, el portavoz en San Fernando
de Henares, un pueblo gobernado siempre por la izquierda, recriminó a
Ruiz-Gallardón que, en su etapa de presidente, cuando visitaba su pueblo "nunca
avisaba". "Después teníamos que escuchar los elogios de nuestro presidente a los
alcaldes socialistas. Yo creo que los mejores son los del PP".(El País.15.10.04)
Gallardón se
enfrenta a Aguirre y Acebes durante la celebración de la Fiesta Nacional
La presidenta de
la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el alcalde de la capital y rival en
la crisis del PP regional, Alberto Ruiz-Gallardón, no han ocultado hoy sus
discrepancias durante las celebraciones de la Fiesta Nacional. Aguirre se ha
mostrado especialmente cáustica con su rival, según informa la SER y le ha
increpado diciéndole: "Qué mal lo has hecho, ahora que estabas tan bien
calladito. Has vuelto a meter la pata".
La imagen de
Aguirre y Gallardón en el desfile, separados sólo por el marido de la presidenta
que se sentó en medio, era una de las imágenes más esperadas del desfile desde
que hace una semana estallara la crisis del PP de Madrid. Y el encuentro no ha
defraudado a los periodistas que buscaban la noticia: según ha confesado la
propia Aguirre le ha acusado de "haber quemado" él mismo a su amigo Manolo Cobo.
Según Aguirre,
ella quiere una lista de integración en el PP de Madrid, pero no va a dar
nombres, porque es "lo que le ha aconsejado la dirección del partido". Respecto
a la actitud de Rajoy, Esperanza Aguirre ha destacado que se haya mantenido al
margen, "para dejar libertad a Gallardón".
Sobre "el Real
Madrid"
Precisamente
Acebes y Gallardón han protagonizado al término del desfile una acalorada
discusión de más de 20 minutos, en la que se ha podido ver como Gallardón se
dirigía en tono encolerizado a Acebes. El portavoz parlamentario del PP, Eduardo
Zaplana, se ha dirigido a la prensa para asegurarles que no pasaba nada, y que
ambos estaban "hablando del Real Madrid".
Gallardón
mantiene silencio hoy, pero no su concejal de Seguridad, Pedro Calvo, quien en
declaraciones a Europa Press, ha criticado a Esperanza Aguirre por querer ser
presidenta del PP en Madrid "a cualquier coste", y ha señalado que sería "una
presidenta de división". (El
País.12.10.04)
Gallardón señala que es la opinión
de Rajoy, y no la de Acebes, la que cuenta en la crisis de Madrid
El alcalde de
Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha dicho hoy que fue Esperanza Aguirre quien
planteó una candidatura de "ruptura" frente al actual presidente del PP, Pío
García Escudero, y que, sobre la crisis del PP de Madrid, es Mariano Rajoy "la
máxima autoridad y aún no se ha pronunciado". Según Gallardón, en esta situación
"si gana Cobo, gana èl, y si pierde, pierdo yo".
Durante su visita
a las obras de soterramiento de las vías del tren en Entrevías (Vallecas), Ruiz-Gallardón
afirmó que la Constitución Española dice que los partidos tienen que tener "una
estructura interna democrática", y que la presentación de dos listas a la
presidencia del PP en Madrid entra en el "proceso democrático".
Según el alcalde,
"quien ha apostado por la no continuidad y sustitución de García Escudero han
sido los partidarios de Esperanza", añadió, "y ante la decisión de no apostar
por Pío para que siguiera siendo el hombre de consenso, nosotros presentamos
nuestra candidatura, porque queremos mantener ese estilo".
"El PSOE sabe que
con el estilo de Cobo como con Pío, ganamos elecciones en Madrid", subrayó el
alcalde, quien tambièn pidió a Esperanza Aguirre "una reflexión para que se dè
cuenta de que en su propio interès debe apoyar a Cobo", quien "no deja fuera a
nadie", ya que era Aguirre "quien quería dejarnos fuera a nosotros".
Preguntado sobre
su vinculación con la candidatura de Cobo, Ruiz-Gallardón dijo que "no sólo la
apoyo sino que me identifico con ella plenamente, y no piense en ningún tipo de
desvinculación mía del congreso o del resultado: si ganamos, el congreso lo gana
Cobo, pero si perdemos, el congreso lo pierde Alberto Ruiz-Gallardón".
En cuanto a las
advertencias procedentes del secretario general del PP Angel Acebes, Ruiz-Gallardón
dijo no haber hablado con èl desde hace una semana y destacó que "no ha habido
ninguna toma de postura por parte del presidente Mariano Rajoy, y al margen de
lo que otros hayan podido decir".
"La máxima
autoridad es Rajoy, como no podía ser de otro modo, y su actitud ha sido
respetar la democracia interna", agregó el regidor.
Ante la pregunta
de por què no se presentaba èl mismo en lugar de Cobo a la presidencia del PP en
Madrid, Ruiz-Gallardón dijo que "por pura coherencia con el discurso que mantuve
cuando fui presidente de la Comunidad: es mejor que el presidente tenga plena
dedicación, no confundida con la responsabilidad institucional". ( Cadena
Ser. 11.10.04 )
Dos diputados
con Cobo, tres concejales con Aguirre
Dos de los 57
diputados del grupo parlamentario del PP en la Asamblea de Madrid, liderado por
Esperanza Aguirre, apoyarán a Manuel Cobo, su rival, en el congreso regional del
próximo mes; y tres de los 30 concejales del grupo municipal del PP, a las
órdenes del alcalde Alberto Ruiz-Gallardón, respaldan a la presidenta autonómica
y no a su vicealcalde. La Cámara madrileña tiene 111 parlamentarios; el
Ayuntamiento, 55 ediles.
El pasado fin de
semana, tras anunciar Cobo que disputaría a Aguirre la presidencia del partido
en Madrid, el secretario general del PP, Ángel Acebes, afirmó que a quienes
pongan en peligro la cohesión del partido "no les va a salir gratis". Cobo
respondió que, si él gana, no tomará represalias contra nadie.
En este clima,
los diputados Pablo Morillo y Javier Rodríguez adelantaron ayer que, si no se
llega a una lista única, apoyarán a Cobo porque "representa la continuidad del
estilo de Pío García-Escudero". Por contra, los concejales Eva Durán, Ángel
Garrido y Carlos Izquierdo han manifestado su respaldo a Esperanza Aguirre. (El
Pais.12.10.04)
ENTREVISTA: ESPERANZA AGUIRRE
PRESIDENTA DE LA COMUNIDAD DE MADRID
"Ese gesto de Alberto de descalificación hacia mi candidatura, diciendo que
Manolo Cobo es el centrista y el liberal..."
Pregunta.
¿Vaya lío que han organizado ustedes en Madrid?
Respuesta.
Lío, ninguno. Después de 11 años, el presidente del PP de Madrid, Pío
García-Escudero, ha decidido no presentarse a la reelección por quinta vez. Y a
mí me pareció oportuno presentar mi candidatura. El miércoles por la noche, el
señor Ruiz-Gallardón me dijo que si no aceptaba que el secretario general fuera
Manuel Cobo, éste presentaría su candidatura. Y eso es exactamente lo que ha
sucedido.
P. Antes
de esa cena, ¿le había comentado algo al alcalde?
R. Claro.
Llevo dos meses comentándoselo.
P. ¿Han
hablado con Rajoy, para ver qué se puede hacer?
R. ¿Qué se
puede hacer? Yo creo que no hay que tenerle miedo a la democracia interna de los
partidos. Alberto Ruiz-Gallardón no se presenta. Él tendrá que explicar por qué,
y por qué envía a Manolo Cobo a presentarse. A mí todo me parece muy respetable,
y, por tanto, no tengo nada que decir.
P. ¿Le
parece bien a Rajoy que haya dos candidaturas?
R.
Pregúnteselo al señor Rajoy. Pero en un partido democrático no se pueden evitar
dos, tres, cuatro o siete candidaturas.
P. Lo
preguntaba por la imagen de desunión que puede darse ahora que el objetivo es
consolidar el liderazgo del nuevo presidente del partido.
R. Tanto
el señor Cobo como yo hemos dicho claramente que somos compañeros de partido de
muchos años y sabemos que nuestros adversarios están en el PSOE. Otra cosa es
que hayamos anunciado nuestras candidaturas. Y que la de Manolo Cobo obedezca a
que el señor Ruiz-Gallardón le ha empujado a ello.
P. En el
mes y medio que falta hasta el congreso regional del PP, ¿qué posibilidades hay
de que logren aunar sus voluntades en una candidatura única?
R. Hay
muchas posibilidades porque mi candidatura pretende integrar a todos. A cuantas
más personas, mejor. No he aceptado la imposición de un secretario general
porque creo que ese cargo no lo debe imponer nadie, yo tampoco. Tiene que ser
una persona que suscite las mayores adhesiones en todas las sensibilidades del
partido. Hay muchas personas que han sido durante años fieles a Rodrigo Rato, y
que también tendrán algo que decir sobre el secretario general.
P. A Cobo,
¿qué puesto puede ofrecerle para que desista de su candidatura alternativa?
R.
Cualquier puesto. Pero lo que yo no puedo es aceptar imposiciones.
P.
¿Cualquiera, incluido ser el nuevo secretario general?
R.
Incluido, pero sin imposiciones. Ese gesto de Alberto de descalificación hacia
mi candidatura, diciendo que Manolo Cobo es el centrista y el liberal... Pues el
miércoles por la noche yo era lo suficientemente centrista y liberal como para
que él pidiera que Cobo fuera mi secretario general. Es curioso todo esto.
P. ¿Cuál
será el puesto, en esa candidatura, de Ricardo Romero de Tejada, aún secretario
general del PP de Madrid?
R. El
señor Romero de Tejada, mucho antes que el señor García-Escudero, dijo que no se
pensaba presentar a la reelección.
P. ¿Estará
en la ejecutiva?
R. No,
porque no se va a presentar a la reelección.
P. ¿Cuándo
comunicó al presidente de su partido, Mariano Rajoy, su decisión de presentar su
candidatura al PP madrileño?
R. Hace ya
bastante tiempo. Antes del verano.
P. ¿Qué le
dijo él?
R. Que los
acontecimientos venían por su orden. Y que primero sería el congreso nacional.
P. Una vez
concluido el congreso nacional, ¿le dio alguna recomendación para que todo salga
bien?
R. Mariano
Rajoy está enormemente satisfecho del resultado del congreso nacional del
partido. No era un congreso fácil. Se planteaba después de 14 años de un
liderazgo muy fuerte con José María Aznar. Ha sido parecido, en este sentido, al
congreso de Sevilla. Ahora él quiere que los congresos regionales salgan igual
de bien, con el partido en las regiones renovado y fortalecido. Y en todos
mostrando el deseo de mostrar mayor cercanía a los ciudadanos, de escuchar más y
de ser capaces de hacernos autocrítica.
P. Sobre
autocrítica se habló en el congreso de su partido...
R. La
única que utilizó en el congreso la palabra autocrítica fui yo.
P. Pero,
al valorar los distintos discursos, se ha destacado la autocrítica que hizo el
alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón.
R. El
señor Ruiz-Gallardón dijo una frase: "Algo hemos debido de hacer mal". Pero la
palabra autocrítica la utilicé yo.
P. ¿Con
qué significado?
R. Creo
que debemos hacer autocrítica porque el PSOE nos ha colocado tres adjetivos:
autoritarios, antiguos y antisociales. Y a pesar de que nuestra gestión ha
demostrado todo lo contrario. ¡Qué hay menos autoritario que un líder
carismático que deja, por voluntad propia, de encabezar una candidatura! Nada.
¡Qué hay más social que haber puesto en práctica las políticas capaces de crear
casi cinco millones de empleos! ¡Y qué hay más moderno, es decir, menos antiguo,
que haber aplicado políticas que en todos los países europeos están copiando,
que han servido para pasar del 24% de paro de 1996 a menos del 8%; que en Madrid
es menor, del 6,5% de paro! Sin embargo, no hemos debido de transmitirlo bien.
P. ¿Por
qué?
R. Porque
perdimos. Aun con los paliativos de las circunstancias en las que se produjo el
14-M, durísimas, pues nos pretendieron hacer responsables nada menos que de la
muerte de 192 conciudadanos; cercaron nuestras sedes en el día de reflexión; nos
llamaron asesinos en los colegios electorales. Pues ni el amplísimo apoyo
recibido en esas circunstancias (9, 7 millones de votos), ni los logros del
Gobierno nos deben cegar -los dioses ciegan a los que quieren perder- e impedir
hacer la autocrítica dentro del partido.
P. ¿Es
sólo una autocrítica a su política de comunicación?
R.
Entiendo que no hemos sido capaces de trasladar a la ciudadanía lo que los
ciudadanos esperaban de nosotros. No hemos sido capaces de hacer ver,
especialmente a los jóvenes, los grandísimos logros, en mi opinión, de los
Gobiernos del Partido Popular. Es verdad que la mayoría de nuestros votantes se
mantuvo fiel el 14 de marzo, pese a las circunstancias. Pero es verdad también
que hubo 600.000 españoles que nos votaron en 2000 y no en 2004. Y eso, muy
probablemente, además de las circunstancias del 14-M, está relacionado con la
manera de conectar con la gente.
P. Sobre
esa conexión quería preguntarle algo. Justo cuando Rajoy comenzó su discurso de
clausura el domingo en el congreso se produjo una avalancha de militantes y de
compromisarios hacia la salida.
R. Eso ha
pasado siempre. A las dos de la tarde del día de la clausura, todo el que se
tiene que ir a coger su avión, se va. Siempre se prevé que los congresos acaben
a las dos, y siempre ha habido muchísimos compromisarios de distintos lugares de
España que tienen que coger trenes, autobuses, aviones y no quieren perderlos.
P. ¿Es más
importante coger el avión que escuchar a su líder y nuevo presidente?
R. El
avión se lo pagan ellos.
P.
Entonces, además de un fallo de comunicación, ¿hubo un fallo de organización?
R. En
todos los congresos, de dos a dos y cuarto, la gente empieza a irse.
Probablemente nos equivocamos, y la clausura, en vez de empezar a las once,
debía haber empezado a las diez.
P. Ocurrió
justo al terminar Aznar y comenzar Rajoy.
R. Ha
pasado siempre a las dos de la tarde. No hay más historias. Es un fallo de
organización, y lo asumo, pues fui la presidenta de ese congreso.
P. El día
anterior no había ningún avión previsto y de los 3.028 compromisarios previstos
sólo acudieron a votar 2.541. ¿Qué pasó con los otros 500?
R. No
todos los compromisarios electos retiran finalmente su acreditación. Muchos no
pueden venir finalmente a Madrid. De los compromisarios que retiraron su
acreditación, es decir, de los que vinieron, el 98% votó a Mariano Rajoy.
P. En el
congreso, ¿qué fue lo que más y lo que menos le gustó del discurso de Aznar?
R. Quizá
la fuerza con la que le vi. Y lo que menos, la frase "tenemos razón". Yo hubiera
dicho "creemos que tenemos razón, y, mientras no nos demuestren lo contrario,
estamos dispuestos a defenderlo".
P. Dentro
del más y el menos, ¿dónde situaría la referencia de Aznar a la cal viva?
R. Es que
la cal viva es una realidad, que comprendo que a algunos no les guste, pero es
así. Hay quienes han tapado con cal viva sus asesinatos.
P. ¿Y la
referencia de Acebes a la Guerra Civil, le gustó?
R. Ángel
Acebes, lo que dijo es que el PSOE, en lugar de dedicarse a utilizar la mayoría
que le han dado los españoles para construir, la utiliza para cinco cosas. Y la
primera de ellas es desenterrar el fantasma de la Guerra Civil, a pesar de que
en la anterior legislatura se adoptó por unanimidad un acuerdo, que también lo
llevamos a la Asamblea de Madrid, para no volver a aventarla entre nosotros.
P. ¿Está
de acuerdo con él?
R. Lo que
dijo Acebes es que el PSOE está agitando ese fantasma, y claro que estoy de
acuerdo.
P. ¿Y del
discurso de Rajoy?
R. De
Mariano siempre me gusta la ironía, el sentido del humor. Me gustó mucho el
arranque, cuando contó que el señor Rodríguez Zapatero no quiere guerras, ni
terrorismo, ni pobres. Claro, ni nadie. Fue un gran discurso en el que ofreció,
nada menos, que un pacto en política exterior. Lo que menos me gustó es quizá,
por lo avanzado de la hora, que podía haberlo acortado un poco.
P. El
sábado, Rajoy dijo que los ciudadanos no entenderían que ustedes den "volteretas
de titiritero" ni que "sean lo que no son". ¿A quién se refería?
R. Habría
que preguntárselo a él. Vamos a ver, hay quien pretende que los que no somos de
izquierdas tenemos un estigma que nos impide ser legítimos representantes de los
ciudadanos. Y el carné de quienes sí lo son lo dan nuestros adversarios
políticos. Ante eso hay quien se pretende disfrazar de lo que no somos. Y yo
creo que los ciudadanos no esperan que nos disfracemos, sino que ofrezcamos una
alternativa auténtica al PSOE hoy en el Gobierno.
P. ¿Por
ejemplo?
R. Rajoy
dijo que aquí caben todos los que quieran trabajar por el PP. Y crean en las
ideas del PP. Pero los que quieran aprovecharse del PP, ésos no caben.
P. Usted
se suele definir como liberal, pero quienes no simpatizan con usted la definen
como el ala derecha del PP.
R. Eso me
gusta mucho, porque quiere decir que la palabra liberal es de connotación
positiva. Quienes no simpatizan conmigo, como no quieren darme ninguna
connotación positiva, me niegan la condición de liberal. Eso a mí me halaga
porque yo lucho por las ideas liberales. Y si, incluso a los que no simpatizan
conmigo, la palabra liberal les parece tan positiva que me la tienen que negar,
eso quiere decir que el liberalismo está abriéndose camino. Y es para lo que yo
estoy en política. No para abrirle camino a Esperanza Aguirre, sino a las ideas
liberales.
P. Pero el
PP no es liberal.
R. El PP
es de centro reformista. Centrista porque no es dogmático, no es autoritario y
quiere abrirse a todos. Y reformista porque no se conforma con la sociedad como
está, y está dispuesto a reformar todo aquello que tenga posibilidad de mejorar.
Y como liberal me defino yo.
P. Si
usted es liberal y el PP de centro reformista, ¿Gallardón qué sería, el
progresista?
R. El
señor Gallardón ha preconizado en su discurso el centro integrador. A mí me
parece una idea muy positiva. Está muy bien. Pero si hablamos del centro
integrador como un lugar donde caben todos, tenemos que tomar alguna prevención
porque no preconizamos un partido único. Queremos la alternancia como esencia de
la democracia. Por eso los partidos tenemos que estar de acuerdo en lo básico,
desde luego en la democracia y la defensa de la Constitución, y la defensa de
los derechos humanos, etcétera. Pero los ciudadanos reclaman que los partidos
seamos diferentes. Que cuando un partido, a los ojos de la sociedad, fracasa,
haya otro capaz de ofrecer un proyecto diferente.
P. Por
bajar del mundo de las ideas, la oferta del PP ha sido hasta ahora la de un
partido "cohesionado y unido". Con dos candidaturas, ¿seguirá siéndolo?
R. No hay
que tener miedo a las dos candidaturas. A lo que hay que tener miedo es al PSOE,
que pone en sus estatutos que tiene que hacer elecciones primarias y luego las
evita. Y si los militantes del PP deciden que no quieren que yo presida el
partido en Madrid, pues cuanto antes saberlo, mejor.
P. Ya,
pero eso no lograría un apoyo del 98%, como tuvo Rajoy el fin de semana pasado.
R. No
tengo ningún interés en un congreso a la búlgara. Los partidos son democráticos.
Es obligación de los partidos ejercer la democracia interna. Se ha puesto en
este último congreso la condición de tener el 20% de los avales, lo que tampoco
es excesivo. Que serán unos 400.
P. El
señor Gallardón pidió el martes que no se tuvieran "otras ambiciones", y puso
como ejemplo a seguir a García-Escudero. ¿A qué se refería?
R. No lo
sé. Pero si piensa en mí, no he tenido nunca un proyecto personal en política,
ni lo voy a tener. Es un proyecto de principios y de valores, porque de verdad
creo que los principios y valores que defiende el PP se deben explicar mejor a
los ciudadanos para que tengamos el apoyo de la mayoría no sólo en la comunidad
y los ayuntamientos madrileños, sino también para contribuir a que haya un
resultado en 2008 que le lleve a Mariano Rajoy a La Moncloa.
P. ¿Antes
de 2008 cree que puede haber elecciones?
R.
¿Generales? Hay mucha gente que opina que sí. Pero yo creo que no, y si yo fuera
José Luis Rodríguez Zapatero no convocaría elecciones anticipadas. Pero él puede
pensar distinto.
P. El
señor Rajoy ha dicho que su objetivo es que el PP sea alternativa ya "por si las
cosas se tuercen". ¿Qué significa que las cosas se tuerzan?
R. Pues si
el PSOE continúa con esta sarta de rectificaciones, creación de incertidumbres,
ministros que dicen que es inexorable el empobrecimiento de España, cambios
sistemáticos de opinión. Y la ciudadanía percibe que este Gobierno no tiene la
capacidad de aglutinar una mayoría suficiente en el Parlamento, porque es
evidente que es un Gobierno débil, pues el PP está aquí. Pero la mayoría nos la
tienen que dar los ciudadanos. Nos la tenemos que ganar en la calle.
P. Si en
el año 2008, o cuando sean las elecciones, el señor Rajoy no lograra ser
presidente del Gobierno, ¿cree usted que podría seguir siendo líder del PP?
R. Eso ya
es mucho anticipar. Ni lo considero, porque estoy convencida, especialmente si
este Gobierno sigue por el camino que va, de que Mariano Rajoy va a ser el
próximo presidente del Gobierno de España.
P. Y para
un futuro más lejano, ¿a usted le gustaría ser presidenta del Gobierno de
España?
R. No me
lo he planteado jamas. Jamás. Tengo mis ambiciones archicolmadas. Las tenía ya
cuando fui ministra, excuso decirle cuando fui presidenta del Senado. Y ahora
que he logrado, con el esfuerzo y las dificultades que todos conocen, ser
presidenta de la Comunidad de Madrid, la primera mujer que preside una comunidad
autónoma de España después de más de cien elecciones autonómicas. Jamás me lo he
planteado.
P. Una
cosa que no entiendo. Si están todas sus aspiraciones colmadas, ¿por qué se
presenta a presidenta del PP de Madrid?
R. No. Yo
creo que debemos hacer como en el resto de España: en todas las autonomías,
quien preside la comunidad autónoma, preside también el PP regional. Y no he
anunciado mi candidatura hasta que el actual presidente, al que quiero hacer
presidente de honor en el congreso, ha anunciado que ahora tiene otro encargo y
que no se presentará a la reelección. Me ha parecido que no debe haber un vacío
en el partido favorito de los madrileños, que es el PP.
(*) Publicado en
El País.10.10.04
AGUIRRE ACUSA A
GALLARDÓN DE QUERER "TODO EL PODER" EN EL PP
Esperanza Aguirre,
presidenta de la Comunidad de Madrid y candidata a presidir el PP regional,
afirmó que si el pasado jueves no pactó con
Alberto Ruiz-Gallardón
una candidatura conjunta fue porque el secretario general del PP, Ángel Acebes,
le dijo que debía esperar y dejar opinar primero a la dirección nacional del
partido. Aguirre agregó que Ruiz-Gallardón ha demostrado que "quiere todo el
poder" en el PP al plantear una candidatura alternativa encabezada por su hombre
de confianza, el
vicealcalde Manuel Cobo.
Tras el cruce
de acusaciones entablado el pasado jueves entre Aguirre, por un lado, y Ruiz-Gallardón
y Cobo por otro, los protagonistas de la crisis en el PP madrileño continuaron
ayer atacándose a través de los medios de comunicación, ya en plena carrera
electoral ante el congreso regional del próximo mes. Sólo el alcalde se mantuvo
en silencio.
Aguirre
explicó, en declaraciones a la cadena Cope, que el miércoles, día en el que ella
anunció públicamente su candidatura, se reunió con el actual presidente, Pío
García-Escudero, y con el secretario general del PP, Ángel Acebes, para
comunicárselo. Y que Acebes le pidió expresamente "que no saliese ningún nombre
de candidato a secretario general antes de consultarlo con él, porque querían a
alguien que se dedique a tiempo completo y que opinase la Ejecutiva nacional".
La presidenta
de la Comunidad aseguró que ésa es la razón de que, durante la cena que mantuvo
con Ruiz-Gallardón ese mismo día, no aceptase la "imposición" del alcalde para
que Manuel Cobo fuera de número dos en una lista conjunta.
Tras señalar
que siente por Ruiz-Gallardón un cariño "casi maternal", afirmó que ella "ya
sabía" que el alcalde "no se conformaría con unos puestos en la Ejecutiva", y
que en su reunión con García-Escudero y Acebes lo comentó con ellos: "Yo ya
dije: 'Pío, ya verás como lo que quiere es todo el poder, la secretaría general,
mínimo'. Y si yo hubiera aceptado, luego habría querido el 50% de los puestos en
la Ejecutiva", subrayó la presidenta.
Si el día
anterior Ruiz-Gallardón había dejado caer que Aguirre no es "centrista" ni
"liberal" porque no respeta al adversario, ella se preguntó ayer si "es más
centrista y liberal subir los impuestos que bajarlos", en referencia a la subida
de varios tributos que introdujo el alcalde en los presupuestos de este año.
El número
dos de Aguirre en la Comunidad, Ignacio González, señaló, sin citar a Ruiz-Gallardón,
que "si alguien está utilizando esto para plantear un pulso a la dirección
nacional, me parece una falta de lealtad al partido y a los militantes".
Por su parte,
Manuel Cobo, en una entrevista en Tele 5, insistió en ofrecer una imagen de
mayor "moderación" que, dijo, es la que necesita el partido de Mariano Rajoy
para ganar las elecciones. "Hay posturas en mi partido más centristas, como la
que representamos Alberto Ruiz-Gallardón y yo, y posturas que están más a la
derecha, como la que representa Esperanza Aguirre". Cobo animó a los afiliados a
que voten "en libertad" y aseguró que no entiende "cómo hay personas que creen
que tienen la propiedad del voto de los afiliados al PP" ni cómo su adversaria
"puede tener la seguridad" de que los militantes populares "van a hacer lo que
ella quiera". "Harán lo que ellos quieran", remachó.
Los presidentes
del PP en El Escorial, Javier de Miguel; La Cabrera, Alejandro Sanz; y Torrejón
de Ardoz, Pedro Rollán, mostraron ayer su apoyo a la candidatura de Cobo. Sanz
consideró que es "excelente" que "no haya una política de amén a todo" y que en
un contexto de libertad se puedan presentar varios candidatos, y De Miguel
destacó la "línea de renovación y de centro" que representa el vicealcalde.
Por contra, los
portavoces del PP en Alcorcón, Fernando Díaz, y en Getafe, José Luis Moreno,
mostraron su respaldo "incondicional" a Aguirre. Díaz calificó de "inoportuna"
la presentación de una candidatura alternativa por parte de Manuel Cobo. "Nos
sentimos mucho más cerca de la candidatura de Esperanza Aguirre, quien ha
demostrado su talante dialogante, sus firmes convicciones y que es una persona
cercana y muy humana". Moreno aseguró que todos los dirigentes del PP en la zona
sur están con la presidenta autonómica. ( 09.10.04 )
BOTELLA: "NO
RECONOZCO A MI PARTIDO"
Ana Botella,
esposa de José María Aznar y concejal del PP en el gobierno municipal de Alberto
Ruiz-Gallardón, afirmó ayer: "En esta crisis no me reconozco, no reconozco a
nadie, no reconozco las cosas que se están diciendo, no reconozco a mi partido
en estos modos". En declaraciones a Efe, Botella se mostró convencida de que "la
dirección nacional del partido ya estará mediando" para que se llegue a una
"candidatura de integración" entre las listas de Esperanza Aguirre y Manuel
Cobo.
La edil aseguró
que Aguirre es "amiga" suya y que con Ruiz-Gallardón está "muy a gusto" porque
la trata de forma "exquisita". Aznar, afirmó, "no está preocupado" por la crisis
del PP en Madrid, porque "él ahora está en una nueva etapa de su vida, muy
ilusionado" con sus clases en Estados Unidos. ( 09.10.04 )
LA DIRECCIÓN
DEL PP EMPLAZA A GALLARDÓN A MOSTRAR CON VOTOS SUS APOYOS EN EL PARTIDO
Sin mencionar a
nadie, Ángel Acebes, secretario general del PP, denostó la candidatura a la
presidencia del PP de Madrid, que Alberto Ruiz-Gallardón ha impulsado en su
vicealcalde, Manuel Cobo. Avisó de que "no será gratis" adoptar estas
iniciativas; que la "dirección nacional no está para pedir favores a nadie, ni
para debérselos a nadie", y que el PP estará "siempre con quien une y aglutina"
y "no con quien divide o tiene o se presta a estrategias personales". Además,
respaldó la tesis de Esperanza Aguirre de que el secretario general del PP de
Madrid debe ser "alguien con dedicación completa".
Acebes enfatizó
ayer en Ávila que una vez anunciadas las candidaturas, sólo queda competir y
mostrar cada uno sus "apoyos". Como en Galicia, la dirección del PP optará por
la estrategia de la inacción pues, según Acebes, "no está ni para pedir favores
ni para debérselos a nadie". Eso sí, añadió, "a la dirección nacional y al
conjunto del partido le interesa saber el respaldo y los apoyos que tiene cada
quien y, por tanto, someterse a un congreso para ver cuánto hay de ruido y
cuánto de nueces, porque a veces es más el ruido que las nueces".
El número
dos del PP avisó: "Si alguien piensa que es gratis primar intereses
personales por encima de los intereses generales se equivoca. Esto no va a
ocurrir y la dirección nacional del PP siempre va a estar con quien une, con
quien aglutina y cohesiona". Y advirtió: "No vamos a permitir que se primen ni
estrategias ni intereses personales en ningún sitio".
El secretario
general del PP eludió especificar quién une y quién divide en la crisis de la
presidencia de la Comunidad de Madrid. "Hago una reflexión con carácter general
para todo este proceso de congresos" regionales, donde distintos dirigentes han
anunciado su intención de presentar listas alternativas.
Pero su
respuesta a otra cuestión deja claro el destinatario de sus invectivas. Le
preguntaron si el secretario general del PP de Madrid debía ser alguien dedicado
a esa tarea a tiempo completo, como defiende Esperanza Aguirre. Replicó que sí:
"Debe ser alguien que tenga la mayor dedicación posible y muy en especial en
esta etapa del PP".
La guerra de
candidaturas estalló en Madrid porque el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón,
entendió que no era posible una lista de integración porque Aguirre no quiso
aceptar que el secretario general fuera Manuel Cobo, vicealcalde y ahora cabeza
de la lista alternativa. En la dirección del PP ha molestado que Gallardón
culminara su ruptura justo cuando Mariano Rajoy anunciaba en una entrevista en
TVE que iba a incorporarle a las reuniones de maitines. ( 09.10.04 )
GALLARDÓN Y
AGUIRRE ABREN OTRA CRISIS EN EL PP AL ENFRENTARSE POR EL PODER EN MADRID
Tras un año
entero de enfrentamiento más o menos disimulado desde las instituciones que
ambos dirigen, el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón y la presidenta de la Comunidad
de Madrid, Esperanza Aguirre, abrieron ayer públicamente la guerra por el
control del PP madrileño, cuyo congreso regional se celebrará el próximo mes. El
número dos de Ruiz-Gallardón, el vicealcalde Manuel Cobo, anunció que
presentará una candidatura alternativa a la de Aguirre para presidir el partido,
y acusó a su rival de haber "despreciado" a los afiliados y de querer "ocupar
todo el poder" en el partido.
Aguirre, por su
parte, afirmó que el alcalde, con quien cenó la noche del miércoles para tratar
de buscar una fórmula de consenso in extremis, le había planteado un
"chantaje" y que ella no aceptaba "imposiciones". Ruiz-Gallardón replicó que
quien rechazó la integración fue ella y que si Aguirre fuese una persona
"centrista" y "liberal" no habría habido enfrentamiento.
Por primera vez
en 11 años, los compromisarios que acudan al congreso en representación de los
77.000 afiliados del PP en Madrid tendrán que debatirse entre dos candidaturas.
Y, por primera vez, dos dirigentes del partido muestran tan abiertamente sus
diferencias. Desde 1993, Pío García-Escudero, presidente a propuesta de José
María Aznar y amigo personal de Ruiz-Gallardón, había sido confirmado en el
cargo por los afiliados con amplísimas mayorías. Ahora ha decidido no
presentarse de nuevo.
Aguirre anunció
oficialmente su candidatura el pasado miércoles, aunque sus colaboradores en el
Gobierno autonómico hacía meses que venían planteando y defendiendo públicamente
la necesidad de que el presidente de la Comunidad fuese también el máximo líder
del partido, como ocurre en el resto de España. "Un consejero ha llegado a decir
que desde hace años la líder indiscutible del PP en Madrid es Esperanza Aguirre.
Eso es un desprecio a Pío García-Escudero y a los afiliados que lo eligieron
democráticamente", protestó ayer Cobo, antes de asegurar que hasta el último
momento el alcalde ha intentado llegar a una fórmula de consenso con la
presidenta.
"Le dijimos:
'Esperanza, en política no se puede ocupar todo el espacio, todo el poder'. Le
planteamos que fuese ella la candidata a presidenta y yo, en su lista, el
candidato a secretario general. Pero se negó. Tiene todo su derecho, pero
también lo tengo yo a presentarme. Precisamente para defender que cualquier
afiliado tiene los mismos derechos en este partido", agregó el vicealcalde
madrileño.
Esperanza
Aguirre, en declaraciones a la cadena SER, explicó que en la cena del miércoles
noche había ofrecido a Ruiz-Gallardón "integrar a personas suyas en la
Ejecutiva, en secretarías ejecutivas o vicesecretarías", pero que él le había
respondido que o Cobo era secretario general o habría candidatura alternativa.
"La imposición y el chantaje no son métodos. Si a mí hasta me parece bien Manuel
Cobo", afirmó la presidenta sin precisar si le parece bien en abstracto o bien
para secretario general, "pero no me parecen bien las formas y los métodos".
"No hubo
chantaje en absoluto. ¿Plantear una candidatura alternativa es hacer chantaje?",
preguntó Cobo a los periodistas al anunciar su decisión. "Lo que yo espero y
deseo", añadió, "es que no haya ningún tipo de imposición ni chantaje a partir
de ahora, y mucho menos desde las instituciones [la Comunidad y el
Ayuntamiento]. Que nadie ofrezca ventajas o perjuicios a los afiliados en
función de a quién vayan a votar en el congreso".
Un leonés a la sombra del alcalde
Manuel Cobo
Vega nació en Ponferrada (León) hace 48 años, aunque vive desde los siete en
Madrid, adonde llegó de la mano de su padre, Manuel Cobo Calleja, un constructor
leonés autodidacta que se embarcó en la aventura de crear uno de los polígonos
industriales mayores de España y lo logró en el municipio de Fuenlabrada, al sur
de la capital.
Ha hecho toda
su carrera política junto a Alberto Ruiz-Gallardón, primero en la Asamblea de
Madrid, en la oposición y en el gobierno, y ahora en el Ayuntamiento. Afiliado
al PP desde 1985 y después de ejercer nueve años como abogado, decidió dar el
salto a la arena política tras presenciar la "traición" del diputado tránsfuga
Nicolás Piñeiro, quien en 1989 impidió que prosperara una moción de censura del
PP y el CDS contra el socialista Joaquín Leguina.
Conoció
entonces a Ruiz-Gallardón y decidió incorporarse a las listas del PP para las
elecciones autonómicas de 1991. Pidió expresamente el puesto en el que había
concurrido Piñeiro, el 19, pero tuvo que conformarse con el 26. A partir de ahí
su acercamiento al entonces líder de la oposición fue en aumento. Empezó como
diputado raso, pero en 1995 Ruiz-Gallardón, ya presidente, lo nombró portavoz
del grupo parlamentario del PP. Cuatro años después lo designó consejero de
Presidencia y más tarde también de Hacienda y portavoz del Ejecutivo.
Desde entonces
ha sido la mano derecha del hoy alcalde, y en muchas ocasiones su rostro ante
los medios de comunicación. Cuando Ruiz-Gallardón fue elegido por José María
Aznar para encabezar la candidatura en las elecciones municipales de 2003, Cobo
ocupó el número 4 de la lista: justo detrás de Pío García-Escudero, presidente
del partido en Madrid, y de Ana Botella, esposa de Aznar.
El PP ganó los
comicios y Cobo fue designado vicealcalde. En ese puesto sufrió uno de los
momentos más críticos de su vida política: el escándalo de los tránsfugas
socialistas Eduardo Tamayo y María Teresa Sáez salpicó a un director general de
su departamento, que reservó a sus espaldas una habitación de hotel para una
concejal, esposa del abogado de Tamayo.
Cobo dirige el
proyecto de candidatura olímpica que pretende hacer de Madrid la sede de los
Juegos de 2012. Fuera de su despacho también es un amante del deporte: juega al
pádel y adora al Real Madrid. Está casado y tiene dos hijos y dos hijas. (
08.10.04 )
ENTREVISTA:
ESPERANZA AGUIRRE Presidenta de la Comunidad de Madrid :
"La imposición y el
chantaje no son métodos"
En una
entrevista en la Cadena SER, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza
Aguirre, criticaba ayer la decisión del número dos de Alberto Ruiz-Gallardón,
Manuel Cobo, de presentarse como candidato a la presidencia del PP madrileño, y
narraba la cena en la que intentó llegar a un acuerdo con el alcalde de Madrid.
- La cena.
"Ayer [miércoles], que estábamos en una cena para negociar una lista en la que
yo le ofrecí que integrara a personas suyas en la ejecutiva, secretarías
ejecutivas o vicesecretarías, dijo [Ruiz-Gallardón] que o era Manolo Cobo
secretario general o presentaba mañana a las 11 su candidatura. Yo es que creo
que no debo aceptar imposiciones".
- Besos y
desacuerdos. "Acabó [la cena], nos abrazamos y nos besamos, pero sabiendo que yo
no aceptaba la imposición. Yo estoy por hacer una lista de integración en la que
quepan todos, pero de ahí a que sea una imposición en la secretaría general, me
parece que no. Hay también otras sensibilidades en el partido. Yo creo que hay
que tratar de utilizar este mes y medio que tenemos para tratar de hacer una
lista en la que todos se sientan cómodos, en la que todos se sientan
representados, y muy especialmente Alberto Ruiz-Gallardón y toda la gente que le
acompaña".
- Una forma de
presión.
"Las cosas
políticas son siempre tensas. Pero el alcalde y yo llevamos ya tantos años en
esto que nos conocemos muy bien. Espero que no se produzca [un choque de
trenes]. Suele ser bastante común en los procesos de los partidos que se
presente otra lista para hacer más fuerza a la hora de integrar, para presionar
más".
- Posible
retirada de Cobo.
"No sé. Esas
cosas suelen ocurrir. Con Manolo Cobo tengo mucha amistad y hasta me puede
parecer bien que se presente. Me parecen mal las formas. La imposición y el
chantaje no son métodos. A mí me parece que lo que hay que hacer es hablar,
negociar".
- Chantaje e
imposición. "He dicho que no me parecen buenos los métodos de imposición y de
chantaje: 'O pones al secretario general o mañana presento mi candidatura'. Es
una advertencia, quizá, una amenaza. Quizá es excesivo lo de chantaje, será
advertencia, amenaza".
- Los
militantes decidirán. "No, no, me parece muy bien que se presente Manolo Cobo y
vayamos a ver a quién eligen los militantes. Cuando uno se presenta a una
elección puede ganar o puede perder. Así es la democracia. Hay que tomarlo con
deportividad. Yo creo que voy a ganar".
- Las
opiniones. "Creo que sobre el secretario general del PP de Madrid hay muchas
gentes que también tienen que opinar. Yo por eso no he propuesto a ninguna
persona de mi confianza. Creo que tenemos que tratar de que sea la persona que
pueda dedicarse a tiempo completo al partido y que reúna la confianza de la
inmensa mayoría de los compromisarios y militantes de Madrid".
- Posible
fisura. "No. Lo que hay son las disputas lógicas en los procesos precongresuales.
Que a mí me hubiera gustado que no existieran. Yo tuve la oportunidad de haber
dicho, pues sí, vale, Manolo Cobo secretario general y candidatura única. Pero
no me pareció correcto. Puede que yo me haya equivocado. Yo no soy dogmática".
- La victoria.
"Creo que sí ganaré, pero esto es como los deportes. Podemos ganar o podemos
perder.
Aguirre dice
que no podía llevar a Cobo de 'número dos' sin el visto bueno de Acebes
La presidenta
autonómica, Esperanza Aguirre, ha dicho hoy que el pasado miércoles, cuando
anunció su candidatura, se reunió con el actual presidente del PP de Madrid, Pío
García-Escudero, y el secretario general nacional, Angel Acebes, y éste les
pidió que "no saliese ningún nombre de candidato a secretario general [regional]
antes de consultarlo con él porque querían alguien que se dedique a tiempo
completo y que opinase la Ejecutiva Nacional".
Precisamente
ese es el cargo que ha motivado la presentación de una candidatura alternativa
encabezada por el vicealcalde de la capital, Manuel Cobo, y auspiciada por
Alberto Ruiz-Gallardón. En opinión de Aguirre, la petición de Acebes "es lógica,
porque se trata de la Secretaría General de la organización territorial del
partido que tiene un Gobierno en la Comunidad autónoma más poblada, y quizá la
más importante", ha dicho en declaraciones a la Cadena Cope.
El propio
Acebes se ha referido a la crisis, aunque ha evitado posicionarse a favor de
ninguno de los dos candidatos. “Cuanto mayor acuerdo y mayor consenso mejor,
pero hay veces que cuando se llega tan lejos, la dirección nacional no está ni
para pedir favores ni para debérselos a nadie”, decía Acebes. El secretario
general de los populares mostraba así su deseo de que los candidatos se
enfrenten en demuestren los apoyos con los que cuentan.
ENTREVISTA: ALBERTO RUIZ-GALLARDÓN Alcalde de Madrid :
"Esperanza no ha querido practicar
la integración"
El alcalde de
Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, contestó ayer a Esperanza Aguirre en la rueda de
prensa posterior a la reunión de la Junta de Gobierno Municipal.
- Apoyo a Cobo.
"Como consecuencia de los reiterados anuncios que Esperanza Aguirre había hecho
de su pretensión de ocupar la presidencia que ostenta [Pío] García-Escudero, él
tomó la decisión de no competir. Eso abre las puertas a que cualquier militante
pueda presentarse. Manuel Cobo tiene absolutamente todo mi apoyo, hasta el punto
de que le he pedido que me incluya en su lista. Se intentó buscar el consenso.
Ayer [por el miércoles], Cobo le propuso a Esperanza Aguirre una fórmula de
integración de las dos candidaturas, pero no fue aceptada".
- Las
acusaciones. "Si no hubiese habido esa pretensión de Esperanza de desplazar a
Pío como presidente del partido en Madrid, por supuesto que Pío hubiese seguido.
Pero él no quería entrar en la confrontación".
- El estilo de
Pío y Cobo. "Cobo representa lo que ha sido la línea que nos ha llevado a ganar
tres veces la Comunidad y tres veces el Ayuntamiento con mayoría absoluta,
siempre con un partido abierto a todos. Ése es el estilo de Pío y el de Cobo.
Esperanza Aguirre, legítimamente, no ha querido seguir esa línea ni practicar la
integración".
- Presentación
legítima. "No hay que mezclar la presentación de la candidatura con otras cosas
[la decisión de Rajoy de incluirlo en maitines]. Aguirre, muy
legítimamente, presentó su candidatura antes incluso de que se produjera ese
encuentro, que estaba previsto, en el que se buscaba la integración. Está en su
derecho".
- No hubo
chantaje. "No lo he oído. Pero ni jurídica ni dialécticamente [hubo chantaje].
Nosotros buscamos una aproximación, un consenso. Y podía haberse producido. Pero
no fue aceptada. La integración de dos candidaturas pasa por que quienes las
encabezan ocupen puestos de responsabilidad significativos".
- Rajoy lo
sabía. "No he hablado todavía con Rajoy sobre la presentación de la candidatura,
pero él sabía perfectamente cuál era la situación del PP en Madrid y cuál era mi
criterio".
- El debate
interno. "Esto va a fortalecer al PP. El que los militantes elijan
democráticamente, el que no se les impongan candidaturas desde arriba, el que no
se diga -porque no está en nuestros estatutos- que por ocupar un cargo público
se tiene un derecho natural a asumir determinadas responsabilidades dentro del
partido, eso nos va a acercar más a los ciudadanos".
- Respeto al
adversario. "Liberal hay que ser no sólo por ideología, sino sobre todo de forma
natural y sin que se note. Además de ser liberales, nos tenemos que comportar
como liberales: respetar al adversario. Que no pase por la imposición. ¿Qué
quiero decir con todo esto? Que Manuel Cobo es profundamente centrista, y
profundamente liberal, y no solamente por su pensamiento, sino porque siempre ha
tratado con respeto a sus adversarios, y nunca ha usado el poder político para
algo que no sea trabajar en servicio a los demás. Con eso me identifico yo.
¿Cuál es el pensamiento político de Esperanza Aguirre? Es una magnífica pregunta
para hacerle a ella. Pero sí le digo que, si nosotros hubiésemos encontrado ese
mismo estilo centrista y liberal en Esperanza, hoy estaríamos hablando de una
candidatura de integración y conjunta. Eso no se pudo producir". ( 08.10.04 )
AGUIRRE DICE
QUE NO PODÍA LLEVAR A COBO DE 'NÚMERO DOS' SIN EL VISTO BUENO DE ACEBES
La presidenta
autonómica, Esperanza Aguirre, ha dicho hoy que el pasado miércoles, cuando
anunció su candidatura, se reunió con el actual presidente del PP de Madrid, Pío
García-Escudero, y el secretario general nacional, Angel Acebes, y éste les
pidió que "no saliese ningún nombre de candidato a secretario general [regional]
antes de consultarlo con él porque querían alguien que se dedique a tiempo
completo y que opinase la Ejecutiva Nacional".
Precisamente
ese es el cargo que ha motivado la presentación de una candidatura alternativa
encabezada por el vicealcalde de la capital, Manuel Cobo, y auspiciada por
Alberto Ruiz-Gallardón. En opinión de Aguirre, la petición de Acebes "es lógica,
porque se trata de la Secretaría General de la organización territorial del
partido que tiene un Gobierno en la Comunidad autónoma más poblada, y quizá la
más importante", ha dicho en declaraciones a la Cadena Cope.
El propio
Acebes se ha referido a la crisis, aunque ha evitado posicionarse a favor de
ninguno de los dos candidatos. “Cuanto mayor acuerdo y mayor consenso mejor,
pero hay veces que cuando se llega tan lejos, la dirección nacional no está ni
para pedir favores ni para debérselos a nadie”, decía Acebes. El secretario
general de los populares mostraba así su deseo de que los candidatos se
enfrenten en demuestren los apoyos con los que cuentan. ( 08.10.04 )
MÁS
INFORMACIÓN