El Gobierno de
Esperanza Aguirre ha repartido las emisoras de televisión local de Madrid entre
grupos de comunicación y empresarios afines al PP. De 30 licencias, la Iglesia
católica ha obtenido cinco, y cuatro el periodista de la Cope Federico
Jiménez-Losantos, las mismas que Antena 3. Blas Herrero (Kiss FM) ha recibido
dos. El Mundo e Intereconomía explotarán una cada uno. El presidente del
Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, obtuvo 10, y José Frade, tres, aunque no en
Madrid capital, donde ya emite. Localia, que opera desde hace cinco años, no ha
recibido ninguna.
El resultado del
concurso para la adjudicación de canales de televisión digital terrestre al
sector privado fue hecho público ayer por el vicepresidente primero de la
Comunidad de Madrid, Ignacio González (PP). Junto a las licencias locales, el
Ejecutivo regional también acordó la convocatoria de un concurso para lanzar una
cadena de ámbito autonómico. Esta frecuencia fue adjudicada a Quiero TV en 1999
y revirtió a la Comunidad en 2002, tras cesar sus emisiones. La otra autonómica
está en manos del grupo Vocento (editor de Abc), que opera bajo la marca
Onda Seis, desde hace cinco años.
Localia, la red
de emisoras gestionada por PRISA, no ha obtenido ninguna licencia de las ocho
demarcaciones a las que se presentó. También quedaron fuera del reparto las
ofertas presentadas por el grupo Zeta-Tele 5 y Prensa Ibérica.Esta adjudicación
se ha producido una semana después de que el Gobierno central autorizara a
Sogecable (participado por el Grupo PRISA, editor de EL PAÍS) a emitir en
abierto las 24 horas del día y con varios meses de retraso.
González explicó
que a la hora de examinar las 115 candidaturas admitidas de las 123 presentadas,
la mesa de contratación ha tenido en cuenta "la pluralidad informativa, la
calidad de la programación y la creación de empleo". El concurso, convocado a
finales de 2004, ha sido resuelto por la Comisión Audiovisual de la Comunidad de
Madrid, presidida por el secretario general del Consejo de Gobierno, Salvador
Victoria.
La mayoría de los
adjudicatarios carece de experiencia en el sector televisivo, en contra de lo
que sucede con algunas de las empresas que han sido excluidas. De las nueve
empresas que han recibido licencias, sólo Canal 7 y la emisora del Arzobispado
están operativas en la actualidad. La ley de medidas urgentes para el impulso de
la televisión digital terrestre, aprobada hace dos meses por el Gobierno
central, primaba a aquellas empresas locales que estuvieran en funcionamiento
desde 1995.
Cada demarcación
contará con cuatro canales (uno de ellos gestionado por los Ayuntamientos),
salvo en Madrid, que explotará ocho (uno municipal y siete privados). En la
capital, el ámbito con mayor densidad de población (más de tres millones de
personas), las licencias han recaído en el Arzobispado de Madrid, Homo Virtualis
(grupo Intereconomía), Kiss FM (Blas Herrero), Libertad Digital (Federico
Jiménez-Losantos), Televisión Digital Madrid (Enrique Cerezo), Unedisa (editora
del diario El Mundo) y Uniprex (Antena 3-Onda Cero, José Manuel Lara,
también editor de La Razón).
La Iglesia
Católica ha conseguido en total cinco licencias: a la que explotará el
Arzobispado se unen las cuatro de Iniciativas Radiofónicas de TV (Alcobendas,
Collado-Villalba, Móstoles y Alcorcón), entidad impulsada por la Cope, cadena de
radio propiedad de la Conferencia Episcopal. En Madrid operaba ya bajo la
denominación Popular TV. A estas cinco emisoras, la Cope suma, indirectamente,
las cuatro adjudicadas al periodista estrella de esa cadena: Federico
Jiménez-Losantos, quien ha obtenido cuatro frecuencias (Madrid, Móstoles, Alcalá
de Henares y Fuenlabrada). El periodista tiene como soporte empresarial un
portal de Internet denominado Libertad Digital.
El principal
beneficiado por el reparto ha sido el productor cinematográfico Enrique Cerezo
(presidente del Atlético de Madrid), a través de la sociedad Televisión Digital
Madrid, SLU, que ha logrado una frecuencia en cada una de las 10 demarcaciones
en las que se ha dividido el mapa audiovisual de Madrid. Las divisiones
territoriales abarcan varios municipios, a excepción de Madrid.
Los partidos de
la oposición consideran "una agresión al pluralismo" el reparto de canales
digitales realizado por el Gobierno de Aguirre. El secretario general de los
socialistas madrileños, Rafael Simancas, consideró "intolerable" el reparto,
tanto en la forma como en el fondo, al hacerse "de manera despótica y
aprovechando el verano para evitar la repercusión pública". Lamentó que este
proceso se haya hecho "sin el mínimo diálogo" con el sector o con las fuerzas
políticas. "Ha sido una decisión despótica y unilateral, en la línea del sector
más duro del PP al que aspira a representar Aguirre".
Simancas señaló
que la decisión "trasluce sectarismo" y representa "una vulneración grave del
derecho al pluralismo de los ciudadanos". Anunció que en el nuevo periodo de
sesiones pedirá explicaciones a Aguirre en la Asamblea y que su grupo verificará
"todos los extremos del proceso por si se hubiera vulnerado la legalidad".
El secretario de
Comunicación de los socialistas madrileños, Miguel Ángel Sacaluga, manifestó que
estas adjudicaciones "siguen los dictados de los sectores más radicales del PP"
y se equiparan a las que hace pocos meses protagonizaron el presidente balear,
Jaume Matas, así como el hasta hace poco presidente de Galicia, Manuel Fraga,
quienes concedieron las licencias a grupos afines al PP.
Fausto Fernández,
dirigente de IU-Madrid, dijo que Aguirre sigue considerando la Comunidad como
"un cortijo"· "Reparte entre sus amigos con tal grado de alevosía y descaro que
empieza a tocar uno de los fundamentos básicos de la democracia: la libertad de
información". Fernández agregó que el reparto de las concesiones es "un
gravísimo atentado del Gobierno regional y compromete aún más su credibilidad
democrática".
Las televisiones
locales se otorgarán por un periodo de 10 años y deberán comenzar sus emisiones
en ocho meses, tras la notificación a las empresas adjudicatarias.
Algunas de las
empresas más consolidadas en el sector audiovisual de la Comunidad de Madrid se
han quedado fuera del reparto de las 30 licencias locales de televisión digital
terrestre concedidas ayer. Entre estas compañías figuran Localia (impulsada por
el Grupo PRISA) y las emisoras agrupadas en la Asociación de Televisiones
Locales. Tampoco Canal 7 (José Frade) ha obtenido la licencia en Madrid capital,
pese a su notable implantación.
Localia emite en
la Comunidad desde hace cinco años, aunque en algunas localidades, como Madrid,
Móstoles y Alcalá de Henares las emisiones comenzaron, pero no bajo la marca
Localia, en 1995. Localia ha desarrollado una programación generalista, con
informativos específicos para cada una de las ocho demarcaciones en las que
opera. A todas ellas había presentado su candidatura. Además, tiene abiertos
nueve centros de producción en distintas poblaciones de la Comunidad de Madrid.
Un portavoz de
esta compañía ha declarado que sus servicios jurídicos están estudiando la
posibilidad de recurrir estas adjudicaciones, "a la vista de los incomprensibles
criterios seguidos para la resolución del concurso".
La Asociación de
Televisiones Locales, que lideraba la candidatura Casandra Desarrollo y
Animación, también ha sido excluida. Tras calificar de "aberrante" y "un
atentando contra el pluralismo" el proceso de adjudicaciones, un portavoz de
esta entidad anunció ayer su intención de recurrir la resolución del concurso.
En su opinión, este trámite se ha llevado a cabo "con el mayor de los
oscurantismos".
El vicepresidente
primero de la Comunidad de Madrid, Ignacio González (PP), aseguró ayer que el
Gobierno regional ha apostado por "la pluralidad informativa". El nuevo mapa
audiovisual, según el Ejecutivo regional, aspira a fomentar el desarrollo y la
competitividad de la industria y la creación de empleo cualificado en el sector.
González insistió
en que la Comunidad continuará aplicando el plan de reordenación del sector que
se inició el pasado mayo con la orden de cierre de 144 emisoras piratas de radio
y 21 de televisión.
La oposición
tacha de "sectaria y caciquil" la adjudicación de la televisión digital en
Madrid
El Gobierno de la
Comunidad de Madrid, presidido por Esperanza Aguirre (Partido Popular), ha
decidido que sean 40 los canales de televisión digital que se puedan sintonizar
en la región, y ha adjudicado 30 de ellos, dejando los diez restantes en manos
de sendos Ayuntamientos. La oposición ha calificado las adjudicaciones como
“sectaria y caciquil”, pues interpreta que responde a los intereses partidistas
de Aguirre.
La concesión
tiene un plazo de diez años, y deberán emitir como máximo dentro de ocho meses.
La región ha quedado dividida en diez zonas: Alcalá de Henares, Alcobendas,
Aranjuez, Collado Villalba, Fuenlabrada, Madrid, Móstoles, Pozuelo de Alarcón,
San Martín de Valdeiglesias y Soto del Real. Serán estos Ayuntamientos los que
puedan además conceder un canal más cada uno. Las televisiones que operen en
cada zona podrán verse también en los municipios limítrofes, excepto en el caso
de la capital.
El Ejecutivo
regional ha recibido 115 ofertas, según ha informado su vicepresidente, Ignacio
González, que ha señalado que a la hora de realizar las concesiones ha primado
la calidad y pluralidad de la oferta informativa, y la proyección de empleos que
se crearán. Además, González ha anunciado que su Gobierno presionará a la
Administración central para lograr un segundo canal de televisión autonómica, y
convocará un concurso para adjudicar la licencia que en su momento se entregó a
Quiero TV y que esta empresa (ya fuera de servicio) perdió por incumplimiento de
contrato.
En la región de
la capital, donde salían ocho canales a concurso, las licencias se han
adjudicado al Arzobispado; a la empresa propietaria del diario El Mundo,
Unidad Editorial SA; y a la página de Internet Libertad Digital, que controla el
periodista Federico Jiménez Losantos, Alberto Recarte (un empresario afín a la
FAES, que preside el ex presidente del Gobierno José María Aznar) y Julio Ariza
(empresario vinculado a los sectores ultracatólicos del PP). Esta página ha
obtenido licencias en el 40% de las demarcaciones, un nivel de penetración
similar al de la cadena de radio Onda Cero. Localia, la cadena de televisión
local del Grupo PRISA (editor de EL PAÍS) mantiene operaciones en todas las
demarcaciones desde hace cinco años, cuenta con seis centros de producción (en
Madrid, Alcalá de Henares, Alcobendas, Fuenlabrada, Getafe, Leganés y Villalba),
ha generado 140 empleos directos y medio centenar de indirectos, y no ha
recibido ni una licencia, según ha informado la Cadena Ser.
La oposición ha
montado en cólera por estas adjudicaciones, realizadas según el Partido
Socialista de Madrid con “agostismo, alevosía y semiclandestinidad para
encubrir la falta de pluralidad, el sectarismo y el caciquismo” que conllevan.
Así lo ha dicho el secretario de Comunicación socialista, Miguel Angel Sacaluga,
que ha anunciado que su partido pedirá explicaciones al Gobierno regional en la
Asamblea autonómica. “Éste es un intento más de imponer, muy en la línea de lo
que le gusta a Esperanza Aguirre, a Aznar y a Acebes, el pensamiento único y
demuestra el nerviosismo de la presidenta regional, que ve cómo los madrileños
le están volviendo la espalda precisamente por hacer este tipo de políticas
radicales”, ha añadido Sacaluga. En su opinión, estas adjudicaciones “siguen los
dictados de los sectores más radicales del PP” y responden a “criterios de
amiguismo y afinidad política”, lo que supone "un atentado al derecho de los
madrileños y madrileñas a recibir una información plural”.
Izquierda Unida,
por su parte, ha calificado las adjudicaciones como “una vuelta de tuerca más”
en la defensa por parte de Aguirre de sus intereses políticos, y “no tiene nada
que ver con la pluralidad informativa ni con contenidos de interés para los
ciudadanos”. Según han comunicado fuentes de este partido a la agencia de
noticias Europa Press, Aguirre “premia a los sectores más afines” a su Gobierno,
algo que “tendrá que explicar” en el Parlamento regional.
(*) Publicado en
la edición digital El País 5 , 6 de Agosto 2005
Aguirre
adjudicó las licencias de televisión digital sin pedir un informe preceptivo (*)
La Comunidad de Madrid adjudicó las
nuevas licencias de televisión digital sin pedir el informe preceptivo al
Consejo Audiovisual de la región, tal y como exige la ley. Por ello, mañana uno
de los miembros de este órgano impugnará el concurso al considerarlo nulo de
pleno derecho, según informa la Cadena SER.
El catedrático de Ciencias de la
Información y miembro de este Consejo, Manuel Nuñez Encabo, ha remitido al
vicepresidente de la Comunidad, Ignacio González, una carta certificada en la
que recordaba la obligación legal de convocar el Consejo y encargar un informe
previo al polémico concurso, según la emisora. Por ello, mañana presentará el
recurso contra el fallo.
De no hacerse así, advertía en
esa comunicación, el proceso sería “nulo de pleno derecho”, por vulneración de
lo dispuesto en la ley de contendidos audiovisuales de la Comunidad de Madrid.
Se da la circunstancia de que el presidente del Consejo Audiovisual de Madrid es
el propio Ignacio González.
Ante estas revelaciones, el
secretario de los socialistas madrileños, Rafael Simancas, ha exigido hoy
responsabilidades políticas por esta actuación. “Sabía de su obligación de
convocarlo, y no cumplió: el vicepresidente ha incurrido en una responsabilidad
política y jurídica, que está siendo estudiada por nuestros servicios”, ha
afirmado.
Por su parte, a las doce de la
mañana, los trabajadores y colaboradores de Tele K se han concentrado en la
Puerta del Sol para protestar por la "adjudicación ilegal" de licencias de
televisión por Aguirre. Esta emisora es una de las cadenas que ya está emitiendo
y que no ha obtenido licencia digital.
El gobierno regional que preside
Esperanza Aguirre concedió la semana pasada las 30 licencias de televisión
digital de la región a la Iglesia y a grupos afines al PP: cinco para la Iglesia
católica, cuatro el periodista de la Cope Federico Jiménez-Losantos, otras
tantas para Antena 3 (del grupo Planeta, editor de La Razón), tres para
el productor José Frade (que ya explota Canal 7), dos para el empresario Blas
Herrero (Kiss FM), una para El Mundo y otra para Intereconomía (editor de
una cadena de radio y la resvista Época).
El más beneficiado del reparto
fue el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, que obtuvo 10. Localia,
gestionada por el Grupo PRISA (editor de ELPAIS.es) y que opera desde hace cinco
años, no ha recibido ninguna ni tampoco las ofertas presentadas por Zeta-Tele 5
ni Prensa Ibérica.
(*) Publicado en
la edición digital El País.10 de agosto 2005
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